BRIAN SALES | ENVIADO

FOTO: RAMÓN ROMERO | ENVIADO

Aunque van abajo en la serie, los aficionados del Atlas no pierden la fe de poder darle vuelta en el estadio Jalisco y conseguir su segundo título en la Primera División. De paso, romperían la racha de 70 años sin título que cargan en su espalda.

Por lo mismo, los aficionados más fieles a la institución se dieron cita afuera del hotel de concentración del equipo para llevar serenata, lucir sus banderas, encender sus bengalas y darle aliento a sus ídolos, mismos de los que depende ya no sólo el equipo y sus seguidores, sino una ciudad que ya respira el ambiente de la Gran Final.

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Los rojinegros, lejos de criticar alguna acción de sus futbolistas, le brindó apoyo a Camilo Vargas, quien se equivocó ante Pumas en las semifinales y replicó su actuación ante los esmeraldas en el juego de ida de la Final. El colombiano fue uno de los más aclamados y reconocidos por parte de los asistentes. Dejó su perfil serio y entonó los cánticos más tradicionales. Entre todas las banderas también se ondeó una con la bandera de Colombia. Otro de los más aclamados fue Diego Cocca, estratega del plantel y quien le brindó esperanza al pueblo atlista.

Los cánticos fueron los de siempre. Desde el “arriba el Atlas, cabrones”, hasta el “que de la mando, de Diego Cocca, todos la vuelta vamos a dar”. Al principio, todos los asistentes se dieron cita frente al hotel, pero rápidamente se movieron hacia un costado, donde se ubicaba una especie de balcón y donde los jugadores salieron para agradecer el gesto, cantar con ellos, grabar historias para sus redes sociales y hasta para firmar una cantidad inagotable de playeras y banderas que nunca dejaron de llegar hasta su ubicación.

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Ahí mismo se dejó ver Eddy Reynoso, quien es fiel aficionado del Atlas y también entrenador de Saúl “Canelo” Álvarez. Incluso también asistió al partido del León y en esta Liguilla está más pegado al equipo. También salió Alejandro Irarragorri, quien encabeza a la directiva del Atlas. Pese a ser alto mando, se convirtió en uno más a la hora de convivir con la afición. Ayudó a pasar playeras, alentó y hasta una bandera sostuvo como parte de la emoción que se vivió en Av. Américas.

El evento duró poco más de 50 minutos. Al final, Aldo Rocha, el capitán del equipo, organizó algunos cánticos para despedir a la gente. Poco a poco ingresaron al hotel en el que descansarán las horas previas al partido más determinante de los últimos años para el Atlas. En sus botines estará la posibilidad de pasar a la historia de la institución y del balompié mexicano si logran acabar con la racha de 70 años sin un título de Primera División.

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