POR JAVIER JUÁREZ

Hasta acostumbrados están, Gallos Blancos es un equipo que continuamente cambia de dueños, incluso antes de tener plumas tuvieron garras. La actual franquicia queretana fue Jaguares de Chiapas hasta el 2013, año en el que Amado Yáñez dueño de Oceanógrafia compró la franquicia y la llevo a Querétaro.
Como un gallo camaleónico el cuadro emplumado está por cambiar de propietario por tercera ocasión en los últimos seis años. Grupo Caliente apostó fuerte por un nuevo equipo, pero el coronavirus entorpeció todo. La empresa de casinos prefiere vender al equipo antes de que sea tarde.
La historia de Gallos Blancos se repite. No es de ahora, es de siempre.
Entre 1950 y 1970 Querétaro deambuló entre la segunda y tercera división, hasta que se fusionó con Atletas Industriales dándole nacimiento a Atletas Campesinos.
El equipo con Antonio Carbajal al frente logró el ascenso a primera división en 1980, sin embargo, en 1982 el equipo es vendido al Sindicato de Petroleros de Ciudad Madero. De esa forma Querétaro se queda sin futbol de primera división.
En 1981 surge otro equipo queretano en segunda división, los Gallos Blancos de la UAQ, mientras que en 1985 nacen las Cobras de Querétaro. Ese equipo fue el primero en jugar en el estadio La Corregidora, sin embargo en 1986 el cuadro se muda a Chihuahua, convirtiéndose en Cobras de Ciudad Juárez.
El futbol de primera división regresa al coloso del Cimatario en 1990, año en el que José Antonio García compra la franquicia del Tampico Madero y la convierte en Querétaro FC.
Al siguiente año, en 1991, Toño les vende el equipo a los hermanos Vázquez Mellado.
Querétaro da pelea, pero desciende en la campaña 1993-1994, mientras que un año después, el Tampico Madero se ve forzado a cambiar de sede. La Jaiba Brava se traslada a Querétaro y nace el TM Gallos Blancos. Ese equipo descendió en 1995.
Pasaron muchos años para que los Gallos Blancos volvieran a cantar. En 2002, tras comprar a La Piedad, Querétaro tuvo futbol de primera división, sin embargo, en 2004, la Federación Mexicana de Futbol redujo el número de equipos y sacrificó a Gallos Blancos e Irapuato, equipos que fueron relacionados con delincuencia organizada.
En 2005 el empresario Juan Antonio Hernández compró la franquicia del Zacatepec y la convirtió en Querétaro. Gallos fue campeón en el Clausura 2005, pero perdió la final por el ascenso contra San Luis.
Querétaro vuelve a cambiar de dueño. Axel Bulle, empresario leonés, compra al equipo y en 2006 viene uno de los momentos más gloriosos de los emplumados. Los albiazules pelean por el ascenso contra Puebla y lo logran.
Tras ganar su lugar en primera división Querétaro es vendido al estado y se forma un patronato liderado por Pablo Cañedo White.
Todo lo bueno terminó un año después. Gallos Blancos regresa a la Liga de Ascenso en el 2007.
Dos años después, en 2009, Querétaro vuelve a ascender y se mantiene en primera división hasta el 2013. Ese año Gallos pierde la categoría, pero Amado Yáñez compra a Jaguares de Chiapas y se lleva a la franquicia a la ciudad de los arcos.
En 2014, Olegario Vázquez Raña compra al equipo, la relación entre queretanos y Grupo Imagen se ve sólida, incluso llegan a la final de liga en el Clausura 2015, sin embargo, en 2019 le venden el equipo a Grupo Caliente.
El nuevo propietario es el que menos tuvo a Querétaro. La empresa de casinos y apuestas está por pasar a Gallos al empresario Emilio Escalante.
Así es Querétaro. Un equipo camaleón.

Faltan detalles para que Gallos tenga nuevo dueño

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