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CRÓNICA

Nueva Jersey.- El rey presumió su corona, lo hizo en territorio estadounidense y con leves dificultades, pero logró mantenerla intacta.

México, tras lograr la Copa Oro, volvió a encontrarse con su vecino incómodo y como dejá vu, les repitió la dosis a los locales.

El regreso de varios jugadores que están en Europa le dio otra cara al Tricolor, más fuerte que antes. Javier Hernández abrió el marcador, Érick Gutiérrez lo amplió y Uriel Antuna se encargó de cerrarlo.

El “Tata” sigue invicto y listo para retar a la Albiceleste, la prueba de fuego llegó.

EL PARTIDO

Con un cuadro poderoso, al menos en nombres, el Tricolor le enseñó pronto las armas a los estadounidenses, el “Tata” no quiso perder la oportunidad de ver en el campo a Javier Hernández, Jesús Corona y Héctor Herrera, jugadores, que él siempre considero indiscutibles, pero que por diversas razones no estuvieron en la anterior Copa Oro.

Enfrente, Gregg Berhalter ocupó a un elenco más joven, Cristian Pulisic y Gyasi Zardes lideraron al país de las barras y las estrellas.

El juego fue ágil, el balón fue de un lado a otro, pero con pocas ocasiones en ambas áreas.

México, a pesar de tener a un plantel más experimentado, sufrió con la energía de los norteamericanos.

El Tricolor tardó en tomar el control del balón, de hecho, pocas veces lo tuvo.

Sergiño, con un tiro de lejos, exigió a Jonathan Orozco, el jugador del Ajax, compañero de Edson Álvarez, estuvo cerca de abrir la cuenta.

El cuadro azteca sufrió con la velocidad de su rival, pero pronto, el “Tecatito” y el “Chicharito”, calmaron todo. El jugador del Porto, con una gran jugada individual, se quitó a su marcador, centró y el nuevo elemento del Sevilla, con un sólido cabezazo, superó a Zack Steffen. Javier logró su tanto 52 con la elástica verde.

El tanto azteca provocó que los norteamericanos retrocedieran algunos metros, pero antes de eso, Zardes, con un tiro de lejos, estuvo cerca de equilibrar la batalla.

El juego, de a poco, volvió a ser de ida y vuelta, Corona, a pase de Carlos Rodríguez, tras una buena jugada de Gallardo, dejó ir una clara opción para ampliar el marcador.

México, antes de ir al descanso, volvió a apretar adelante. Gallardo, por el lado izquierdo, fue la mejor válvula de escape.

Así, con un entretenido duelo, llego una merecida tregua.

EL COMPLEMENTO

Al volver al campo la intensidad se mantuvo, Estados Unidos quiso encontrar pronto el tanto que los metiera de lleno en el partido.

El juego fue amistoso, sin embargo, aztecas y estadounidenses traen un pique de muchos años atrás.

Los roces fueron más, incluso hubo pequeños conatos de bronca, el más llamativo el que protagonizó Héctor Herrera y Alfredo Morales.

Luego de eso vinieron cambios.

Berhalter metió a Miles Robinson y a Josh Sargent en busca de lograr el empate. El “Tata”, más calmado, decidió darle minutos a Hirving Lozano y luego a Érick Gutiérrez, los canteranos Tuzos estuvieron en el campo.

“Guti”, casi al instante, aprovechó un error del portero y amplió el marcador.

A la par de ese tanto vino otro cambio mexicano, Antuna entró al campo y como imán, atrajo al balón y con frialdad definió a un costado de Steffen.

Vinieron más cambios, un penalti a favor de Estados Unidos, pero Orozco lo detuvo y fue todo.

México, con superioridad, se llevó otro clásico de la Concacaf.

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