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Las reglas y los reglazos
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Eduardo Brizio

21, febrero 2023 - 2:38

Un solo gol fue la diferencia

Se ha convertido en una tradición que los primeros lugares de la tabla de goleo, en el futbol mexicano, sean ocupados por jugadores extranjeros. A partir del año 2000, solamente 6 futbolistas nacidos en México han logrado ceñirse la corona de romperredes.

El último ariete azteca que se coronó campeón de goleo fue Alan Pulido, del Rebaño Sagrado, quien marcó 12 tantos en el Apertura 2019 y compartió el honor con Mauro Quiroga del Necaxa.

Para encontrar al penúltimo monarca goleador mexicano, hay que remontarse hasta el Clausura 2011, en donde Ángel Reyna, del América, se coronó marcando 13 dianas.

Antes, fue el Chicharito Hernández, de las Chivas, en el Bicentenario 2010, anotando 10 pepinillos; pero, tuvo que compartir la corona con Hércules Gómez del Puebla.

Omar Bravo, también del Guadalajara, obtuvo el título de goleo en el Clausura 2007, con 11 goles. Así, de los 4 últimos futbolistas mexicanos que obtuvieron el galardón como mejores anotadores, quitando a Ángel Reyna, los otros 3 fueron de los caprinos.

No podemos dejar de mencionar a Jared Borgetti, del Santos Laguna, quien dobleteó, en solitario; es decir sin compartir los honores, en el Verano 2001 y en el Invierno 2000.

Este breve recuento histórico, viene a cuenta en virtud de que, en el actual torneo, cuando se ha jugado ya, prácticamente, la mitad del certamen, la tabla de goleo es encabezada, con 9 dianas, por un futbolista mexicano: Henry Martín, del América, quien atraviesa un gran momento.

Además, dentro de los 10 primeros anotadores, aparte de Henry, se encuentran otros tres compatriotas:  Arturo González, de Rayados, en cuarto lugar, con 5 goles; Javier “Chofis” López, del Pachuca, también con 5 tantos y Víctor Guzmán, de las Chivas, en el octavo sitio, con 4.

Adalberto el “Dumbo” López, es el mexicano que más veces ganó el título de goleo, lográndolo en cinco ocasiones, enfundado en la casaca de los Panzas Verdes del León y posteriormente con los Rojinegros del Atlas, entre 1946 y 1954.

Digo, no es que quiera “poner el dedo en la llaga”; pero, esto nos recuerda la importancia de que los potenciales seleccionados nacionales se acostumbren a anidar la esférica en el arco enemigo; toda vez que, en la pasada Copa del Mundo Qatar 2022, entre avanzar a la siguiente ronda y quedar eliminados … un solo gol fue la diferencia.

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