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Mi perspectiva.José Luis Camarillo
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José Luis Camarillo

8, julio 2022 - 4:30

Mi perspectiva

Letras de oro

Como aquel esforzado trabajador que sonríe con la satisfacción del deber cumplido, así disfrutaron los campeones del mundo que con su presencia dieron el marco perfecto a la presentación del libro Las 100 mejores peleas de la historia, la noche del martes en el Museo Soumaya.

Protagonistas de combates que marcaron profunda huella y que quedarán para la posteridad en las crónicas respectivas, acompañaron a Mauricio Sulaimán Saldívar, presidente del Consejo Mundial de Boxeo, entidad que llevó ese espectacular compendio a la realidad.

JC Chávez se reencontró con otros astros que dejaron el alma en el ring para, en las más diversas ocasiones, rescatar la victoria de fondo del infierno. El propio César del Boxeo ratificó que la pelea que marcó su carrera fue la primera que protagonizó contra Meldrick Taylor y que consus puños llevó a uno de los desenlaces más dramáticos que se recuerden.

Uno de los rounds más dramáticos fue aquel en que Diego Corrales le arrancó el triunfo de las manos a José Luis Castillo, ahí presente.

Carlos Zárate y Alfonso Zamora, quienes polarizaron la atención universal en la Pelea de los Zetas, demostraron que aquel afán de golpearse con todo el poder que son capaces se quedó dentro del espacio de 6×6 metros cuadrados. Esta vez aceptaron ponerse a cara a cara una vez más, con Humberto “Chiquita” González en el papel de “réferi”.

Miguel Ángel González, un férreo contrincante de Julio César Chávez que le batalló de tú para forzar un resultado de empate, reapareció en un evento grande, rehabilitado de sus problemas de alcoholismo, con el WBC como pieza fundamental para cambiar su vida, como ocurrió con JC.

Rafael Márquez, Érik “Terrible” Morales, Rafael “Bazooka” Limón, Francisco “Bandido” Vargas son otros personajes que hicieron acto de presencia y que igualmente ofrecieron “peleas del año”, como lo hiciera la “Chiquita” contra Michael Carbajal.

Pipino Cuevas y José Luis Bueno compartieron la agradable velada y el placer de revivir noches épicas, que quedarán plasmadas para la eternidad en el libro que desde ya es también una pieza histórica, que resume la emoción y el drama que sólo el boxeo puede transmitir.