Aún con el freno de mano, el impulso de las herramientas con las que cuentan los llamados “cuatro grandes” instala a cada uno en su lugar. A pesar de las afectaciones que dejó la Leagues Cup en América, Cruz Azul, Pumas y Chivas, la realidad es que conforme se olvida aquel fracaso los protagonistas recuperan, en algunos casos, la memoria, mas en otros se recrudece peligrosamente.

América, por ejemplo, ha encontrado la mejor medicina para olvidar el incidente sufrido ante los equipos de la MLS con el triunfo contundente sobre Tigres, al que le han quitado su racha perfecta.

La actuación del Chiquito Érick Sánchez, adornada con un doblete, ha revivido el alegre accionar de unas Águilas que se han reencontrado en medio campo con Álvaro Fidalgo y Alejandro Zendejas. El êxito les permite ascender en la tabla, en paralelo con Cruz Azul, para mantenerse como los dos únicos conjuntos invictos de la Liga MX.

La Máquina, que había caído con estrépito frente a Seattle Sounders, todavía se aturde en zona defensiva, y de no ser porque el Santos Laguna se quedó con un hombre menos a partir del minuto 40, ¿quién sabe cómo le habría ido en CU? La buena noticia es el nivel excelso de Charly Rodriguez, quien trazó un golazo de película, además de la feliz reaparición de Gabriel Fernández. El Toro logró el oportuno gol de la victoria para corregir el descontrol que siembra la zaga. La prueba de fuego vendrá la próxima semana, cuando los visite el campeón Toluca, aunque los celestes tienen la fortuna de que los rojos jugarán los cuartos de final de la Leagues Cup contra Orlando en gringolandia, lo que obligará al Turco Mohamed a guardar cartuchos en CU.

Curiosamente ese factor le ha servido a Pumas para salir con vida del infierno choricero, pero a la ofensiva requiere un delantero matón, por lo que continúa lejos de la pelea. Peor aún se hallan las Chivas, en el antepenúltimo escalón con apenas tres puntos y tres derrotas en cuatro fechas, tras caer ante el frágil FC Juárez. Todo un circo para Gabriel Milito, quién ya no sabe cómo justificar la mala suerte de su Rebaño. En la que se metió…