Al grito de: “Una cosa es defenderte, proteger a tu país, a tu sociedad y otra muy distinta bombardear hospitales y matar de hambre a niñas y niños inocentes”, el gobierno español anunció medidas de presión sobre Israel por el “genocidio en Gaza”, entre las que se incluye el “embargo de armamento”.

Desafortunadamente, no solamente debemos soportar los horrores de la guerra; sino, todas sus consecuencias negativas y las repercusiones que tiene cuando la política se infiltra en otros ámbitos.
El Festival de Eurovisión es un concurso de composición de canciones televisado internacionalmente que se celebra desde 1956 en diferentes sedes y supuestamente es “apolítico”; pero: Irlanda, Países Bajos, Eslovenia, Islandia y ahora España, amenazan con “boicotear” el evento si no se excluye la participación de Israel.

Así, el deporte no ha sido ajeno al conflicto bélico y recientemente, en la vuelta ciclista a España las protestas al respecto se hicieron sentir. Los manifestantes no permitieron que se efectuara la última etapa de la competencia argumentando que: “si los rusos fueron vetados de los eventos deportivos internacionales por la guerra en Ucrania, entonces los conjuntos israelíes deberían de correr la misma suerte”.

Incluso, el presidente de la “Madre Patria” Pedro Sánchez apoyó la moción al tiempo que afirmaba que: “España es quien salva el honor de Europa”, mientras que condenaba la lamentable situación que ocurre en Palestina.

Es entonces cuando surgen las preguntas: tomando en cuenta que la Selección española de futbol, desde ahorita, una (por no decir la gran) favorita para ceñirse la corona en la próxima Copa del Mundo 2026 ¿Qué pasaría si Israel califica al Mundial?, ¿Se abstendrían de asistir a la gran fiesta balompédica?, ¿Exigirían que el equipo israelí fuera descalificado o boicoteado del magno evento?, ¿Dejarían de lado sus “convicciones” y a pesar de ello jugarían tan campantes la justa mundialista?

Bueno sería recordar que se ve muy lejana la posibilidad de que Israel califique al Mundial; toda vez que, está sembrado en un grupo en donde se encuentran: Noruega, Italia, Estonia y Moldavia.

Todo hace suponer que serán los nórdicos y la escuadra “azzurra” quienes luchen por el boleto. El primer lugar pasaría directo y el segundo tendría derecho a disputar el repechaje; sin embargo, los partidos hay que jugarlos y suele suceder que … “del plato a la boca se cae la sopa”.