Eduardo Brizio
14, diciembre 2024 - 6:00
Se disputó la final de ida del Apertura 2024 del balompié mexicano, en el Estadio Cuauhtémoc de Puebla, que terminó con un triunfo del América sobre el Monterrey al son de dos goles por uno.
Echando a volar la sinceridad, los Rayados la sacaron muy barata. Fue gracias a la intervención del cancerbero regio Luis “el Mochis” Cárdenas que no regresaron a la Sultana del Norte llenos de cuero.
Por su parte, los de Coapa (parafraseando a mi gran amigo Enrique “el Perro” Bermúdez): “la tenían, era suya y la dejaron ir”. Al principio del segundo tiempo, Las Águilas se adueñaron de las acciones, desperdiciando la gran oportunidad de poner cifras inalcanzables en el marcador; sin embargo, no liquidaron a su rival, lo dejaron simplemente herido, con muchas oportunidades de remontar en el partido de vuelta.
Tal y como si se tratara de una cuestión “karmática”, apenas habían iniciado las hostilidades cuando el argentino Lucas Ocampo, de los Rayados, quien se desempeña en el medio campo, sufrió un desgarro muscular que lo hizo abandonar el terreno de juego para ser sustituido. Y para su infortunio, todo indica que también se perderá el encuentro de regreso.
Y digo “karmática” porque recordemos que, al inicio de la liguilla, cuando enfrentaron a Pumas, el comité de apelaciones de la FMF, en una más de sus usuales jugarretas, decidió quitarle el castigo que pendía sobre él (Lucas Ocampo) habilitándolo para disputar el duelo de visitante, sin otro argumento que “por sus calzones”, situación que terminó influyendo en la eliminación de la escuadra universitaria.
Otro hecho que me parece digno de comentar es que el “Tecatito” Corona terminó con una cortada en la pantorrilla, producto de una falta recibida al minuto ochenta en la que fue (correctamente) amonestado el defensor Ramón Juárez de los emplumados.
Aunque muchos claman que “se trató de una entrada de expulsión”, lo cierto fue que la falta no reunía los requisitos reglamentarios para “mandar a bañar temprano” al infractor; toda vez que, no se trató de un contacto de lleno y estuvo bien calificado como “temerario” (cuando un jugador realiza una acción que entraña daño físico, no necesariamente grave, sin tener en cuenta el riesgo o las consecuencias para su adversario) lo que se castiga con el cartón preventivo.
Si bien es cierto que el “corte” que sufrió el “Tecatito” luce muy aparatoso; pues son cosas del futbol, sino, entonces que mejor juegue: a las canicas, carreterita o … a las muñecas.
Eduardo Brizio
Los árbitros consagrados
Es cierto que antes del disparo a gol de Kevin, efectivamente está obstruyendo...
13, diciembre 2024 - 6:00
Eduardo Brizio
Yo no lo hubiera marcado
Vaya que resultó polémica la semifinal de vuelta...
10, diciembre 2024 - 6:00
Eduardo Brizio
En una cáscara de plátano
La estadística está en contra del San Luis; en virtud de que, nunca en la historia de los torneos cortos,...
6, diciembre 2024 - 6:00
Eduardo Brizio
Les metieron cinco
Para podernos sentar en la misma mesa a platicar o discutir de arbitraje...
4, diciembre 2024 - 6:00
Eduardo Brizio
Una cosa de locos
Como siempre, las finales con nuestro sistema de competencia “son una cosa de locos”...
29, noviembre 2024 - 6:00