LLEGÓ el 7 de la suerte. El que nunca sale rojo en las maquinitas en los tres sitios y donde de no salir pondrá al rojo vivo la situación de varios. No sólo de equipos, también de técnicos, porque bien es sabido que en el futbol mexicano se da por jugar también a la suerte de los naipes y después de que llegó la caída de Carlos Barra en Monterrey de ahí se siguen en hilerita para ver a quién más se cuelgan por delante. Y como si de la suerte y fortuna se tratara, dos árbitros que habían sido castigados por exceso de grasa corporal, Roberto García Orozco y Francisco Chacón, son ahora los caballos de batalla de los hombres de negro pitando los duelos entre Pumas vs. América y Cruz Azul vs. Chivas respectivamente.

GUADALAJARA, EN ALERTA ROJA VS. EL AZUL
Guadalajara necesita urgente la tripleta de siete rojo para poder dar un respiro ante la apretada situación que vive. Chivas por momentos da la impresión de retomar rumbo, pero es sólo eso porque no ha encontrado la consistencia, y teniendo enfrente a un hueso invicto y poco goleado como es Cruz Azul el asunto no pinta nada fácil. Bien me lo decía Aldo, Chivas debe hacer el partido perfecto, como también me lo comentó Chuy Corona, la Máquina no se quiere desviar del buen momento que tiene y lo quiere alagar. Parecería premención o algo similar, pero en la siete se encuentran frente a frente en diferente banca por vez primera desde su paso por Selección Luis Fernando Tena y Chava Reyes en la Máquina, José Manuel de la Torre en Chivas. Eso de decir frente a frente es nada más coloquial porque Chepo está suspendido y verá el duelo desde la tribuna.

LO DE LAS BARRAS, DELICADO
Increíble que la reunión de barras haya terminado en golpes. Eso no pinta nada bien y menos si somos supersticiosos con el 7. Ojalá esto no contagie y llegue al terreno de juego donde Pumas recibirá al América. Un Memo Vázquez que le tiene tomada la medida al Águila como un Matosas que la tenía tomada con el León. La goleada americanista de la semana anterior hace que Pumas afile las garras, porque el poderío goleador de las Águilas está fuera de toda duda. Pumas necesita terminar los partidos. Parece que en 70 minutos los tiene como local y después se le esfuman entre las manos, siendo que ya no se puede permitir más este lujo.

NACHO, EN PROBLEMAS
Cabezas en juego esta jornada sabatina, la de Nacho Ambriz en Gallos más la que se acumule esta semana. Nacho trabaja muy bien también, pero creo que el factor Ronaldinho lo tiene incómodo y ante esta obligación las cosas no se le dan. Por si fuera poco, enfrentará a Monterrey con la presentación de Mohamed y ya sabemos que ante estreno de técnico los Rayados saldrán a morirse en la cancha. Una jornada donde el Tiburón Rojo también quiere alargar la buena racha frente a ese Toluca que siempre le ha dejado las fauces abiertas, pero esta vez el Tiburón de Carlos realmente luce sólido y fuerte como para que le den un susto.

ADOPTADOS Y ADOPTIVOS EN TUZOLANDIA
Renglón aparte el duelo de adoptados y adoptivos como le ha dado a varios jugadores por llamar el duelo entre León y Pachuca. Estas dos instituciones de mismo paraguas mostraron totalmente la transparencia deportiva en una final y no veo cómo en una jornada 7 no vaya a suceder lo mismo. A mí me parece que lo declarado por Damm fue instrucción directa para calentar el duelo y de ahí comenzar la mercadotecnia que tanto se ha dado por jugar previo a estos partidos como viene siendo a lo largo del campeonato.

LEONES NEGROS INTIMIDADOS
Para finalizar tampoco puede dejar fuera la intimidación a Leones Negros hasta en la Copa. Fueron acuchillados por un penal y ahora les mandan a Fernando Guerrero de central frente a Xolos, parece ser que hay alguien o algunos que les incomoda el rugir de esos Leones Negros en Primera por haberse salido de la tradicional línea de negociación y ya saben a qué me refiero.
PREGUNTA: Una Máquina y un Ferarri contra una Chiva y un Puma… ¿Motores o Topetazos?

HASTA EL PRÓXIMO SILBATAZO
Comentarios: fschwartz@oem.com.mx
PD.- Ni con Viagara pudo el River Plate…Lo único cierto y literal es que el arquero vio pasar el balón y se quedó de pie sin menor gesto en el segundo gol de los bolivianos.