Con la tecnología de Google Traductor

PARÍS 2024

Como director opino ESTO. Salvador Aguilera

Itzel Ubiarco

17, diciembre 2014 - 11:48

17 de diciembre 2014. Salvador Aguilera

CRUZ Azul perdió una gran oportunidad de trascender internacionalmente. El partido contra el Real Madrid era muy complicado, y un triunfo celeste hubiera sido la sorpresa del año, pero hubo momentos en el encuentro que el equipo debió aprovechar para “morirse de algo”. Ayer, no se murió de nada.
Respetó demasiado a un rival al que empezó a enfrentar con cierto temor, como si el compromiso ya estuviera perdido desde antes del silbatazo inicial. Pensar que La Máquina fue precavida porque no quería sufrir una goleada, resulta iluso. De todas formas, el rival le pasó por encima.
También me dio la impresión de que los cementeros sintieron que ya habían cumplido, al llegar a semifinales y enfrentar al Real Madrid. No sé cuándo el Cruz Azul o el propio futbol mexicano tendrán de nuevo la oportunidad de enfrentar a este tipo de rivales. El León lo hizo este mismo año con el Barcelona y también fue goleado. En el caso de La Máquina, la oportunidad se dio en un torneo oficial de la FIFA y tampoco se aprovechó para al menos decir que los conjuntos de la Liga MX no están tan lejos de los grandes, pero tristemente los resultados nos han dicho otra cosa.
Para colmo, el Mundial de Clubes sigue siendo una pesadilla para nuestros equipos. No veo para cuándo uno pueda ser finalista. El proceso de calificación es muy largo y la eliminación, casi inmediata. Entiendo que era difícil esperar más, que el Real Madrid era claro favorito, sobre todo con ese paso impresionante y arrollador. Nada lo detiene, ayer sumó 21 triunfos en forma consecutiva. Y lo más curioso de todo es que Cristiano Ronaldo no anotó, aunque se quiso lucir con una rabona y una “chilena” que no le funcionaron.
Pensé que el bajo nivel futbolístico de los celestes durante el torneo mexicano subiría notoriamente al llegar al Mundial. De alguna manera se quitaron de la mente un torneo para dedicarse de lleno a otro que significaba, pienso yo, una gran motivación, mas luego vimos el excesivo sufrimiento contra los australianos y su poco atrevimiento ante el Madrid. Después del 1-0 hubo momentos para complicarle algo el partido al campeón de Europa, y es ahí cuando los dirigidos por Tena no supieron qué hacer. Con el 2-0 encima fue entonces que se presentó la gran oportunidad y Gerardo Torrado, con toda su experiencia, no pudo superar a Casillas. Era un momento grande para el capitán cruzazulino, porque hubiera sido su tercer gol en un Mundial de Clubes. Contra el Sydney Wanderers no perdonó, pero ante el Madrid le faltó fuerza y colocación.
Ahí se acabaron las ganas del Cruz Azul por seguir luchando. Los cambios no sirvieron de nada y poco a poco esa emoción de enfrentar al mejor equipo del mundo, se transformó en una pesadilla.
De milagro no hubo más goles, porque bien pudieron ser media docena. Chuy Corona falló en una salida, pero intervino de excelente manera en otras jugadas, sobre todo en la primera que tuvo Cristiano Ronaldo, a quien le detuvo un disparo a quemarropa.
Listo. Pasó el Mundial de Clubes para Cruz Azul. ¿Ahora qué? Viene un año de gran exigencia, porque la obligación de un nuevo título sigue creciendo. El 2015 tiene que ser el año de La Máquina. El equipo no estará para menos. Ya se habla de algunas bajas y también hay refuerzos en puerta. La directiva respalda a Luis Fernando Tena, pero hasta el propio “Flaco” sabe que si en el Clausura 2015 no hay buenos resultados, su proceso se puede ver cortado.