29, diciembre 2025 - 6:00
La Selección Mexicana Femenil mantiene el crecimiento / Arte: Abril Hernández
La Selección Mexicana Femenil atraviesa un periodo de crecimiento sostenido desde la creación de la Liga MX Femenil en 2017. El equipo ha comenzado a competir con regularidad ante potencias como Estados Unidos y Canadá, obteniendo resultados en torneos regionales y categorías juveniles que reflejan un progreso.
Expertos comparan el proceso mexicano con el modelo japonés que llevó a la liga Nadeshiko en Japón, ser el impulso para ganar la Copa Mundial Femenina de la FIFA 2011, un camino construido con continuidad, estructura y desarrollo desde la base.
Uno de ellos, Tomoyuki Hoshino, escritor japonés, ganador del Premio Yomiuri de Literatura y experto en el futbol femenil, quien mantiene un vínculo especial con el futbol femenil mexicano desde la repesca rumbo al Mundial de 2003 entre Japón y México—el boleto al Mundial de Estados Unidos fue para Japón al vencer a México por marcador global de 4-2—.
En 2025, comenzamos a escribir una nueva historia. 💚🤍❤️
— Selección Nacional de México Femenil (@Miseleccionfem) December 23, 2025
Por primera vez, la Selección Nacional de México Femenil reunió a su categoría Sub-23, abriendo un camino clave en el proceso de desarrollo rumbo al futuro. ✨⚽️
Con trabajo, identidad y visión, la Sub-23 inició su… pic.twitter.com/unYPQR06VM
“Vi varios partidos de la Liga MX Femenil y encuentros internacionales del Tri Femenil, y pensé que la selección mexicana se ha vuelto más fuerte. En términos de capacidad atlética —velocidad, físico y potencia de disparo— creo que se están acercando al nivel más alto del mundo. Me impresionó profundamente el orgullo con el que compiten las jugadoras”, señala.
Desde la creación de la Liga MX Femenil en julio de 2017 con el inicio del Apertura 2017, las selecciones mexicanas han logrado avances significativos en torneos oficiales:
- Selección Mayor: Juegos Centroamericanos y del Caribe, Oro 2018 y 2023, Torneo Preolímpico Femenino de CONCACAF 2020, Tercer lugar.
- Selección Sub-20: Campeonato Femenino Sub-20 de CONCACAF, Campeón 2018 y 2023.
- Selección Sub-17: Copa Mundial, Subcampeón 2018, Tercer lugar 2025. Campeonato Femenino Sub-17 de CONCACAF, Subcampeón 2018, 2022 y 2024.
- Selección Sub-15: Campeonato Femenino de CONCACAF, subcampeón 2018 y 2024; Tercer lugar 2022.
Estos resultados muestran que México compite en el plano regional y coloca a sus selecciones juveniles en posiciones destacadas en torneos CONCACAF y mundiales, reflejando un crecimiento sostenido de talento y preparación.
El 2025 nos regaló una página inolvidable. 💚🤍❤️
— Selección Nacional de México Femenil (@Miseleccionfem) December 17, 2025
La Femenil Sub-17 conquistó el tercer lugar en el Mundial de Marruecos 🌍🥉, demostrando talento, carácter y mucho corazón.
Y como broche de oro 🧤✨, Valentina Murrieta se quedó con el Guante de Oro, brillando bajo los tres… pic.twitter.com/gocmj4bRgZ
Tomuyoki Hoshino asegura que el éxito de las selecciones radica en sus ligas
El analista japonés Tomoyuki Hoshino, que vivió en México y estudia ambos contextos, destaca que “la fortaleza de una selección nacional depende de una liga sólida y de la ampliación de la base de futbolistas desde la formación”.
Hoshino amplía su análisis al explicar que en Japón la L. League, fundada en 1989, permitió formar a generaciones completas desde edades tempranas.
“Durante la década de 1990, la inversión empresarial atrajo a jugadoras extranjeras de alto nivel y creó una liga en ascenso. Las futbolistas que luego serían campeonas del mundo en 2011 jugaban como jóvenes en ese periodo”, recuerda.
Sin embargo, también advierte que el colapso de esa inversión provocó un estancamiento que obligó a muchas jugadoras a emigrar, una experiencia que más tarde resultaría clave para competir al máximo nivel internacional.
Japón comenzó su camino con la L. League, fundada en 1989, donde se formaron desde jóvenes futbolistas como Homare Sawa, Aya Miyama y Ayumi Kaihori. Estas jugadoras fueron clave para que Nadeshiko Japón ganara la Copa Mundial Femenina 2011 en Alemania, venciendo a Estados Unidos 3-1 en penales tras un empate 2-2. La experiencia japonesa demuestra que un desarrollo lineal y estructurado de liga, formación y competencias prepara mejor a una selección para competir en la élite mundial.
La Liga MX Femenil ha incorporado jugadoras extranjeras de alto nivel, como Mia Fishel, Jennifer Hermoso, Eugénie Le Sommer, Faustine Robert, Jermaine Seoposenwe, Sarah Luebbert, Andrea Pereira y Stephanie Ribeiro. La presencia de estas futbolistas permite a las mexicanas convivir con estilos de juego variados y exigentes, elevando su nivel técnico y táctico.
Pedro López asegura que la Selección Mexicana Femenil está elevando la competencia diaria
Pedro López, director técnico del Tri Femenil, explicó para ESTO que “complementar el talento mexicano con lo mejor de cada continente eleva los estándares de entrenamiento y competencia diaria”. Esta convivencia diaria con talento internacional genera una competencia interna constante, factor clave para reducir la brecha con las selecciones líderes.
Por su parte Andrea Rodebaugh, directora de selecciones nacionales, subraya que la consolidación de las fuerzas básicas es crucial. “Lo importante es que exista una estructura de fuerzas básicas que permita que las jugadoras mexicanas sigan creciendo y puedan ocupar roles principales”.
El fortalecimiento de categorías Sub-15, Sub-17 y Sub-20 asegura que el desarrollo de talento local sea continuo y que las jugadoras mexicanas puedan asumir roles de liderazgo, incluso cuando las extranjeras no estén presentes.
La exjugadora Marilyn Díaz aporta perspectiva desde la cancha. Su experiencia en México y en ligas extranjeras le permite valorar el impacto de la competencia interna y la formación local. “La competencia interna y la convivencia con diferentes estilos de juego elevan el nivel técnico y físico de las futbolistas mexicanas.”
Díaz destaca que las condiciones actuales permiten que las mexicanas puedan dar el salto a ligas extranjeras con mayor éxito, fortaleciendo la experiencia colectiva del futbol femenil nacional y preparando al Tri para enfrentar retos internacionales.
Priorizar el crecimiento económico es un riesgo para la Selección Mexicana
Para Tomoyuki Hoshino, uno de los mayores aprendizajes del caso japonés es que el crecimiento comercial no puede anteceder al desarrollo deportivo.
“Después del Mundial de 2011, la popularidad del futbol femenil en Japón se disparó, pero los organizadores no supieron aprovechar esa oportunidad. En pocos años, el interés decayó y la selección entró en otro periodo de estancamiento que duró casi una década”, explica.
El especialista subraya que una popularidad centrada únicamente en la selección nacional no es suficiente para sostener el futbol a largo plazo. “Cuando el interés se limita a los partidos de la selección, el futbol se consume como un gran evento, pero no se construye una base sólida. Para que una selección se fortalezca, el requisito previo es ampliar la base del futbol”, afirma.
Hoshino considera que el verdadero motor del crecimiento debe ser la liga y sus clubes. “Las jugadoras deben convertirse en figuras a las que las niñas aspiren, y las jóvenes con talento deben sentirse inspiradas para querer jugar al futbol. Esa inspiración no nace del negocio, sino de la posibilidad real de desarrollarse como futbolistas”, señala.
Desde su perspectiva, el salario profesional es importante, pero no debe convertirse en el único objetivo. “Recibir un sueldo suficiente para vivir exclusivamente del futbol es crucial, porque permite invertir tiempo y energía en mejorar el físico y la técnica. Sin embargo, en Japón las jugadoras priorizan sentirse necesarias en un club o jugar en un estilo que les permita crecer, más que ganar grandes sumas de dinero”, explica.
El analista advierte que acelerar procesos comerciales puede generar una percepción equivocada del nivel real. “Juzgarse únicamente por la reacción de los medios nacionales conlleva el riesgo de tener una percepción errónea de las propias capacidades. La verdadera competitividad se desarrolla cuando las jugadoras salen al extranjero y empiezan de cero”, apunta.
Hoshino insiste en que el orden de los factores es determinante. “Primero debe consolidarse la liga nacional y su mercado interno. Si eso se logra, Europa y Estados Unidos se fijarán de forma natural en las jugadoras con talento. Forzar la exportación sin una base sólida debilita el proyecto”, sostiene.
Finalmente, el especialista concluye que México tiene una oportunidad única si mantiene el equilibrio. “México ya cuenta con pasión, visibilidad y una liga estable.
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El reto ahora es no dejarse llevar únicamente por el negocio, sino proteger el proceso. Si el desarrollo se respeta, los resultados internacionales llegarán como consecuencia natural.
