Washington.- La vitalidad y dicharachería que caracterizan a Javier Aguirre se quedaron en la Ciudad de México. El técnico de la Selección Mexicana llegó a la tierra del sorteo mundialista con el objetivo claro, centrarse completamente en los posibles rivales para la Copa del Mundo.

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El arribo desde la CDMX fue a las cuatro de la tarde, la llegada no fue al aeropuerto principal de Washington, sino al Null, que se encuentra a poco más de una hora de camino con el tráfico habitual.
Fue así que Javier, junto a Duilio Davino, director de Selecciones Nacionales Varoniles, tuvieron que soportar el tránsito de la capital norteamericana antes de llegar al hotel, donde llegaron cansados y sin ánimos.

Después de una hora, ambos entraron con la cara centrada en lo que iba a suceder al otro día, uno de los que podría definir el trabajo de los dos por la posibilidad de avanzar en un Mundial de nueva cuenta luego de lo vivido en Qatar 2022.

El Vasco aceptó tomarse una fotografía en la entrada con un aficionado y, posteriormente, entró sin dar algún indicio de amabilidad con los distintos medios de comunicación que estaban presentes.
Javier solamente vio de cerca a la gente de la FIFA, pero tampoco sonrió, ni siquiera expresó algo en su mirada. Solamente enfiló sobre el camino y se dirigió al elevador donde subió a su hogar tentativo.

Los medios se quedaron intranquilos. No sólo los mexicanos quedaron fuera de lugar, también los representantes de Argentina, Ecuador, Paraguay y contados europeos que se mantuvieron en el sitio.
Después de un par de horas, Javier, junto a su esposa y Duilio Davino, salieron para la tradicional comida con el resto de entrenadores y volvieron solamente para desaparecer de nueva cuenta hasta la hora del evento.

La comitiva mexicana arribó sin problemas, Aguirre, Davino y compañía vivirán un día para el recuerdo. En el que su mente estará puesta en las tres representaciones que acompañarán a México en el sector A.

Clara Brugada y Claudia Sheinbaum también llegaron a Washington al sorteo del Mundial

La presidenta de México, Claudia Sheinbaum aterrizó cerca de las nueve de la noche, tiempo de Washington. Pero, a diferencia del resto, ella lo hizo desde la base militar Andrews, en Maryland muy cerca de la capital norteamericana.

Sheinbaum Pardo vivirá su primer encuentro, cara a cara, con el presidente Donald Trump. Luego de que no se habían podido reunir hasta el momento, y, por ahora, será el futbol el que logre romper las barreras.

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Otra que también arribó, aunque ella en vuelo comercial. Fue la jefa de gobierno Clara Brugada, ella estará presente en la fiesta mexicana, posterior al sorteo, que organizan las autoridades nacionales en Washington.