Con la tecnología de Google Traductor

Mi perspectiva.José Luis Camarillo
titulo-foto

José Luis Camarillo

11, noviembre 2025 - 4:13

Quijadas irrompibles

No es un mito. Existen y han existido boxeadores con mandíbula de acero. En México, tenemos a la mano tres ejemplos: Salvador Sánchez, JC Chávez y Saúl “Canelo” Álvarez.
Ni Sal Sánchez contra los noqueadores más poderosos, entre ellos el “Coloradito” López y Wilfredo Gómez, ni tampoco el “Canelo”, “visitaron” la lona.
El jalisciense, soportó los impactos de un terrible cañonero como Gennady Golovkin en sus tres encuentros o los zarpazos de Dmitry Bivol, el mismo que acabó con la invencibilidad del formidable ruso Artur Beterbiev. Tampoco Golovkin experimentó alguna caída en su trayectoria.

Hace tres semanas que la plataforma televisiva DAZN subió a la red X un cuadro con las imágenes de algunas leyendas que se distinguieron por su resistencia al castigo. En orden de colocación, están: Saúl Álvarez, Marvin Hagler, Gennady Golovkin, Oliver McCall, George Chuvalo, Vitali Klitschko, Jake LaMotta, David Túa… y dejó en blanco, con un signo de interrogación, el espacio para que el público elija a su favorito.

Es obvio que faltó Floyd Mayweather. Lo que pudo ser una caída de Floyd, ante Zab Judah, fue dictada como resbalón por el réferi porque, si bien dobló una rodilla y pareció apoyarse en su guante derecho en la lona, todo fue en un prodigioso acto de equilibrio para regresar de inmediato a la posición vertical, y luego alzarse con una decisión unánime en 12 rondas.

La única caída oficial de Mayweather no fue por golpe. Él, voluntariamente, puso una rodilla en el piso en el sexto episodio, para indicar que se había lastimado la mano zurda contra Carlos “Famoso” Hernández. Tras el conteo de rigor y con todo y lo difícil del pleito, Floyd ganó por fallo unánime.
Hagler soportó el temible golpeo del ponchador Tommy Hearns, el mismo que aplastó a Pipino Cuevas y “Mano de Piedra” Durán en su larga cadena de noqueados, o de John Mugabi. Se menciona que el apodado “Maravilloso” tuvo un derribe ante Juan Domingo Roldán, pero en realidad no fue tal. Hay muchos casos más. Ya habrá tiempo para hablar de ellos.

Las opiniones vertidas en este artículo son responsabilidad de quien las emite y no de esta casa editorial. Aquí se respeta la libertad de expresión.