Toronto.-El presidente ejecutivo de los Juegos Panamericanos Toronto 2015, Saäd Rafi, aseguró que la justa continental deja a los jovenes canadienses un legado que comenzarán a aprovechar ahora que las competencias han terminado.

“Ser anfitriones de los Juegos hace que los jóvenes se sientan rodeados y apoyados por un verdadero sentido de comunidad. Durante los Juegos, nuestros jóvenes vieron lo mejor del deporte. Ahora, las sedes se convertirán en sus lugares, en los que encontrarán lo mejor de ellos mismos”, aseguró.

En este sentido agradeció a los gobiernos federal, provincial y municipal, los cuales fueron generosos en su apoyo a los Juegos y con ello comenzaron a construir una herencia para la juventud canadiense.

Aseguró que la Organización Deportiva Panamericana (ODEPA) se va satisfecha por la manera en que se realizaron cada una de las competencias y eso muestra la entrega de todos los involucrados en la realización de la justa.

“Porque llevar a cabo estos Juegos nos dio una nueva confianza en nosotros mismos. Hace 16 días encendimos el pebetero panamericano. Los fuegos artificiales iluminaron el cielo. La magia estaba en el aire. Ahora es historia”, comentó.

“A los atletas y entrenadores, gracias por su valentía, su capacidad atlética y los momentos emocionantes. Construimos podios para ustedes. Pero ustedes nos llevaron un poco más arriba”, aseguró.

Por último, aseguró que “hoy, al cerrar los Juegos, en esta región, nos vemos a nosotros mismos bajo una luz diferente. Hacemos cosas ambiciosas y difíciles. Las hacemos bien”.