Zapopan.- Empezaron con escepticismo y muchas dudas, pero después de la primera victoria rojiblanca sobre América en semana de tres Clásicos Nacionales consecutivos, la afición de Chivas renovó su esperanza y lo demostró previo al duelo de este sábado en el estadio Akron con un recibimiento especial a su equipo, donde la fe por otra triunfo en fila sobre su máximo rival deportivo fue el aliciente perfecto para el público local, que nunca dejó de creer.

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Aproximadamente dos horas antes del inicio del partido entre el Rebaño Sagrado y las Águilas, una larga caravana adornó el circuito rumbo al recinto de Zapopan. Cerca de 350 aficionados caminaron desde un punto a aproximadamente 500 metros de distancia con dirección a uno de sus lugares preferidos. Con cánticos diversos, varias banderas y un aliento incomparable fue como la afición rojiblanca llegó, con una manta por delante como emblema y con la leyenda “el equipo de las multitudes”, con un mensaje claro sobre América, en el sentido de ser el club que atrae más gente y aficionados en la rivalidad más importante y una de las más añejas del futbol mexicano en su historia.

LAS ÁGUILAS SUFRIERON A LA AFICIÓN

América fue el equipo que llegó primero y tuvo que pasar forzosamente a gran velocidad por el espacio donde estaba ubicada la barra tapatía, por lo que recibieron mentadas, gritos en contra y un proyectil que cayó en los ventanales del vehículo, sin nada que lamentar.

Después le tocó el turno al equipo de casa. Fueron aproximadamente 40 segundos en donde el camión con todos los jugadores locales pudieron disfrutar el recibimiento de su fanaticada, llena de esperanza en celebrar otro triunfo sobre su rival.

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CHIVAS ORGANIZA RECIBIMIENTO ESPECTACULAR

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Chivas organizó otro recibimiento en el atrio del estadio Akron casi al mismo tiempo que el primero. Otra multitud de aficionados recibieron a los jugadores quienes pasaron por un pasillo rumbo a vestidores. De los más ovacionados fueron Chicharito Hernández, Alan Pulido, Alan Mozo y hasta el nuevo técnico Gerardo Espinoza, quien comenzó con el pie de te jo su aventura en Guadalajara.