Era un duelo de dos pesos pesados y así se vivió. Eagles y Ravens protagonizaron uno de esos partidos capaces de ponerle la etiqueta de contendiente al ganador y de alimentar las dudas del perdedor. Justo eso fue lo que pasó. Con un Philadelphia que logró imponer condiciones para llevarse la victoria 24-19 sobre Baltimore y colocarse como un serio aspirante a llegar al Super Bowl.

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¿Cuántas victorias lleva al hilo Eeagles?

Ya son ocho victorias en fila las que tienen las Águilas, algunas mejores que otras. La de este domingo, ante los Ravens, debe considerarse como una de calidad. Philadelphia logró limitar a la poderosa ofensiva de Baltimore a tan solo 12 puntos y también fue capaz de balancear su ataque para hacer daño y conseguir los puntos suficientes para llevarse la victoria.

No fue una tarea fácil, porque en realidad el partido estuvo en el alambre hasta bien entrado el cuarto cuarto, cuando finalmente los Eagles sacaron una brecha irremontable para Baltimore.

Philadelphia logró levantarse de una desventaja de nueve puntos en el primer cuarto y a partir de entonces comenzó a dominar las acciones. La reacción vino gracias a un pase de Jalen Hurts a su ala cerrada Dallas Goedert y un acarreo de una yarda del propio quarterback. Mientras eso ocurría, los Ravens experimentaban un nuevo problema en la irregularidad de su pateador Justin Tucker. Quien falló dos goles de campo importantísimo y un punto extra que complicó las cuentas para su equipo.

A pesar de todo, el partido se fue al descanso con las Águilas al frente 14-12. Un resultado sumamente parejo y que dejaba todo abierto para los últimos dos cuartos. Fue hasta el último periodo, sin embargo, que la cosa se definió en favor de los visitantes.

Como no podía ser de otra manera, fue Saquon Barkley el encargado de marcar la diferencia. El corredor había estado ligeramente apagado a lo largo del partido hasta que de pronto encontró una vía para escaparse 25 yardas y conquistar las diagonales. El golpe fue sumamente duro para los Ravens.

Acostumbrados a correr y correr, Lamar Jackson y compañía se vieron obligados a buscar yardas rápidas sin mucho tiempo en el reloj. La misión era prácticamente imposible y al final se cumplieron los malos presagios. Eagles liquidó las acciones con un gol de campo de Jake Elliott y Baltimore hizo más decorosa la derrota con un touchdown en los últimos segundos de Likely tras pase de Jackson. La patada corta fue infructuosa y todo terminó en favor de las Águilas.

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