Nada volvió a ser igual desde que perdieron su invicto. Los Chiefs se vieron beneficiados de los errores infantiles que cometió Las Vegas en la parte final de un partido que ganaron, pero que aumenta las dudas que arrastran durante las últimas semanas.

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Kansas City batalló para imponerse 19-17 a los Raiders, en duelo celebrado en un día inusual para la práctica del futbol americano de la NFL. La victoria les permite a los pupilos de Andy Reid convertirse en los primeros que ganan su boleto rumbo a los playoffs, algo que han conseguido en los últimos 10 años de manera consecutiva.

El viernes posterior al Día de Acción de Gracias puso frente a frente al campeón contra uno de los peores conjuntos de toda la Conferencia Americana. Pero en la práctica, estuvo lejos de plasmarse la diferencia de cerca de 10 victorias que había entre uno y otro.

Tal como viene ocurriendo en toda la campaña, a Patrick Mahomes se le observa incómodo, incapaz de mover las cadenas de manera consistente. Si bien llega a tener jugadas grandes, producto de su incuestionable calidad, también suele convivir con el error.

En este partido apenas completó 26 de sus 46 envíos para 306 yardas y un touchdown. En un punto del tercer episodio, los Chiefs lograron ponerse en ventaja de 16-3. Con todo y que su ataque no era efectivo en zona roja, la defensiva del campeón se encargó de limitar una y otra vez a Aidan O’Connell.

Pero todo cambió en cuestión de minutos. En un lapso de dos minutos, Las Vegas llegó dos a veces a la zona prometida. Dos bombazos de O’Connell en dirección de Brock Bowers y Tre Tucker le dieron la vuelta al marcador.

Los Raiders no lograron impresionar a los Chiefs con sus respuestas

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Mahomes y su artillería respondió de manera inmediata, con una posesión que derivó en un gol de campo de Matthew Wright, su cuarto de la contienda.

La visita todavía dispuso de un par de oportunidades para llevarse el triunfo. En ambas O’Connell llevó el ovoide hasta territorio rival. La primera fracasó con un intento de gol de campo de 58 yardas de Daniel Carlson que ni siquiera llegó a la zona de anotación; la segunda terminó en un error increíble del centro que provocó un balón suelto cuando ya estaban en territorio para que Carlson tuviera la oportunidad de sacarse la espina.

Al final, los Raiders perdieron porqué demostraron que son un mal equipo, incapaz de ganarle a un campeón que viene a la baja.

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El resultado no deja de ser sumamente valioso para Kansas City, que se pone con récord de 11 victorias y una derrota, todavía como líderes de la Conferencia Americana. Además, ya tienen en mano su boleto a la postemporada, al menos comodín. Por su parte, Las Vegas se hunde en el último lugar de la división Oeste con marca de 2-10.