El campeón de peso minimosca de la Federación Internacional de Boxeo (IBF), Adrián Curiel, hizo a un lado las festividades de fin de año para concentrarse por completo en su preparación, rumbo a la primera defensa de su cetro ante el sudafricano Sivenathi Nonthsinga, a quien le dará la revancha, el próximo 16 de febrero, en Oaxaca.

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Tras la conferencia de prensa, en la que estuvo presente Héctor Sulaimán, representante del Consejo Mundial de Boxeo, así como el gobernador de Oaxaca, Salomón Jara, el Gatito Curiel charló con el Diario de los Deportistas, remarcando que los festejos llegarán después de sortear este compromiso que le espera.

“No festejé Navidad, ni Año Nuevo, ni mi cumpleaños, mi hija cumplió años el 3 de diciembre, tampoco estuve con ella. Son sacrificios que se hacen para llegar en óptimas condiciones para la pelea, ya después de este compromiso vendrá el pastel”, expresó el púgil mexicano, quien se coronó en noviembre pasado al noquear en el segundo capítulo a Nonthsinga en el Casino de Monte Carlo.

QUIERE REPETIR LA FÓRMULA CONTRA EL SUDAFRICANO

El nocaut lo tiene de nueva cuenta presente y está convencido que repetirá esta fórmula. “Vamos a darle la revancha a Nonthsinga. En la primera pelea sentíamos esa fortaleza y en esta la siento al doble; me siento muy bien preparado, me siento mejor preparado que en la primera, no sé si sea en el primero, en el segundo o en los últimos rounds, pero vamos a presionar al rival para buscar el nocaut”, aseveró.
El pelear en territorio nacional representa una motivación doble, pues lo acompañará su familia.

“A esta pelea me acompañará mi mamá, mi hermana, mi papá, que es mi entrenador, también estará conmigo, todos estarán ahí apoyándome, estoy listo para defender mi título donde sea”, resaltó.

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DESEA UNIFICAR

El Gatito señaló que el plan está puesto en unificar su campeonato, por lo que estará pendiente de la pelea que sostendrá este martes por la mañana (tiempo de México), el japonés Kenshiro Teraji, campeón minimosca WBC y WBA, ante el venezolano Carlos Cañizales, en Osaka, Japón.

“Kenshiro es la pelea que busco, me gustaría unificar la división, si no, también la posibilidad de bajar a las 105, me gustarían retos fuertes, estoy enfocado en esta pelea; después, de ganar este duelo, iríamos contra el retador mandatorio que nos ordena nuestro organismo y si se dan las cosas como esperamos, cerrar el año contra Kenshiro en su país”, señaló.

Los organizadores de la cartelera anunciaron que dentro de las peleas de respaldo habrá títulos del Consejo Mundial de Boxeo en disputa, esperando una gran respuesta de la afición en el Auditorio de la Guelaguetza, en Oaxaca.