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13, enero 2024 - 22:23

┃ Jorge Briones

Patrick Mahomes y sus Chiefs se instalan en la ronda divisional. FOTO: Reuters

Apenas llegaron los playoffs y Kansas City Chiefs recuperó su mejor versión para instalarse en la ronda divisional de la Conferencia Oeste.

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El vigente campeón de la NFL dejó atrás las dudas que arrastraba en la fase regular y pese al frío, superaron cómodamente (26-7) a los Miami Dolphins en el Arrowhead Stadium.

No era un escenario fácil para ninguno de los dos equipos. Los cerca de -30 grados, que hizo del partido el cuarto con más frío en la historia de la liga, afectaron hasta cierto punto el desempeño de ambos ataques, sobre todo el de Miami que está acostumbrado al sol de La Florida.

El brazo de Tua Tagovailoa se congeló y solamente pudo tener una serie exitosa a lo largo de la contienda, justo cuando se conectó con el explosivo Tyreek Hill. El “chita” se reencontró con sus viejos fans, a los que logró silenciar con un ingreso a la zona prometida. Pero fue lo único que hizo.

Patrick Mahomes tampoco tuvo su mejor actuación. Apenas completó 23 de sus 41 envíos para 262 yardas y un touchdown. La cuestión negativa para los Kansas City Chiefs pasó por su baja efectividad en zona roja, instancia a la que llegaron en seis oportunidades y solamente en dos lograron anotar de siete.

En cuatro de esas series se tuvieron que conformar con goles de campo convertidos por Harrison Butker.

El resto del trabajo lo hizo la oportuna defensiva de casa. Además de la intercepción, lograron dos capturas de quarterback. Tagovailoa volvió a decepcionar en un partido trascendental, lo cual se ha convertido en una constante desde su llegada al profesionalismo.

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Con este resultado, el vigente campeón de la NFL tendrá que esperar para conocer a su próximo rival. Si Buffalo gana, los visitarán en la ronda divisional; si pierde, recibirán a los Texans. Esos son los dos escenarios que aguardan los súper favoritos de la AFC.

Por su parte, llegó a su fin la temporada de Miami, con tres derrotas en fila. Los pupilos de Mike McDaniel tendrán que esperar un año más para romper una sequía de más de dos décadas sin ganar un juego de playoffs. Los Dolphins no se imponen en un partido de la fase final desde diciembre del año 2000.