Tiene tiempo que el apellido Harbaugh es toda una tradición en el futbol americano de los Estados Unidos. Ya sea en la NFL o en el colegial, Jim y John, como dos gotas de agua, han logrado que sus nombres se escuchen con fuerza cuando de pelear por los títulos se trata. Aunque en años anteriores su éxito ha coincidido, el arranque del 2024 resulta alentador para los hermanos, con John, el mayor, como favorito a ganar el Super Bowl con Baltimore, mientras que Jim está a una victoria de ganar el Campeonato Nacional con Michigan y romper una sequía de casi tres décadas.

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Esta no es la primera vez que el buen momento de los coaches coincide. Hace 11 años, en la temporada 2012 de la NFL, se dio una de esas historias entrañables, cuando Jim Harbaugh era el entrenador en jefe de los 49ers y luego de una gran temporada, enfrentó que a los Ravens de su hermano John, nada menos que en el Super Bowl XLVII.

BRILLARON ESE AÑO

Más allá de que dentro del emparrillado había grandes figuras como los mariscales de campo Colin Kaepernick y Joe Flacco, o los temibles defensivos Ray Lewis y Patrick Willis, muchos de los reflectores en la previa del trascendental encuentro los acapararon los hermanos Harbaugh.

El duelo fue sumamente parejo, sin embargo, al final la victoria fue para John. Baltimore se impuso a San Francisco con marcador de 34-31, en un partido contó con un final dramático, en el domo de Nueva Orleans. La familia Harbaugh vivió una tarde de emociones encontradas, al ver al mayor de los hermanos convertirse en un coach campeón del Super Bowl, mientras que el menor debería esperar en busca de una nueva oportunidad. Lamentablemente para Jim, dos años más tarde terminó su aventura en los 49ers sin poder consolidar un proyecto que tenía pinta de campeonato. Desde entonces, no ha vuelto a la NFL, aunque propuestas no han faltado, tras su buen trabajo realizado en Michigan.

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EL DESTINO Y EL FUTBOL AMERICANO VOLVIÓ A ENCONTRAR A LOS HERMANOS HARBAUGH

Como todo en la vida, ambos hermanos han vuelto a coincidir en lo más alto, aunque cada uno en sus respectivas categorías. Con 16 años al frente de los Ravens, John Harbaugh sueña con ganar su segundo Super Bowl, el tercero de la franquicia. Baltimore llega a la etapa más importante del año consolidado como el mejor equipo de la temporada, no solo en sensaciones, sino en marca, con un imponente 13-3, mismo que le permitió asegurar la primera siembra de la AFC. En caso de derrotar este sábado a los Steelers, Harbaugh podría igualar las 14 victorias que consiguió en el 2019, hasta ahora su mejor campaña como entrenador en jefe.

Aunque en la NFL todo puede pasar, hay ilusión no solo en toda la afición de Baltimore, sino también en el seno familiar, ahora sí, sin necesidad de dividir los buenos deseos.

EL COLEGIAL LO SALVÓ

Del otro lado está Jim. El mejor de los Harbaugh encontró tierra fértil en el futbol americano colegial tras su éxodo de la NFL. Tras un total de nueve temporadas en Michigan, el entrenador en jefe está cerca de consolidar su proyecto con un campeonato, el cual representaría el primero de su carrera.

Los Wolverines fueron rankeados como el mejor equipo de la nación al registrar un récord de 13-0, en lo que hasta el momento es la mejor temporada de Harbaugh como coach del mítico programa. Michigan se coronó como campeón del Big Ten, sin embargo, sus aspiraciones van mucho más allá, con el sueño del campeonato nacional al alcance.

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En las semifinales, Michigan logró imponerse con un cerrado 27-20 a Alabama, en el marco del espectacular Rose Bowl. Ahora en la final del próximo lunes los Wolverines se jugarán el todo por el todo frente a los Washington Huskies. Los pupilos de Harbaugh tienen como misión conseguir el primer campeonato desde 1997.