San Francisco hizo lo suyo, y luego la suerte le ayudó. Los 49ers amarraron la cima de la Conferencia Nacional tras vencer 27-10 a los Commanders y colocarse con una marca de 12-4. La victoria se combinó con la sorpresiva derrota de los Eagles en manos de los Cardinals, quienes hicieron la maldad en el último suspiro del partido, al llevarse el triunfo 35-31. El equipo gambusino recibirá los playoffs en casa y descansará la primera semana, una pausa que le vendrá como anillo al dedo para recuperar a sus jugadores lesionados, lista a la que ingresó este domingo nada menos que el corredor Christian McCaffrey, con molestias en la pantorrilla.

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Los 49ers lograron levantarse luego de la dolorosa derrota de la semana pasada ante los Cuervos. No fue fácil al principio, pero luego lograron imponer sus condiciones. El mariscal de campo Brock Purdy, el villano de la navidad, al lanzar cuatro intercepciones. Completó ante Washington 22 de 28 envíos para un total de 230 yardas y dos touchdowns, sin entregas de balón.

La tarde fue redonda para Purdy, quien además rompió el récord de yardas por aire en una temporada para San Francisco, al superar las 4,278 que Jeff García registró en el 2001. El quarterback tuvo como principal socio al receptor Brandon Aiyuk, líder del equipo con 114 yardas y un touchdown, mientras que el talentoso Deebo Samuel también logró ingresar en una ocasión a la zona prometida.

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Por tierra, San Francisco también se vio dominante. Antes de salir del partido debido a una lesión en la pantorrilla, Christian McCaffrey acumuló 64 yardas. Mientras que Elijah Mitchell logró suplirlo con garantías, al correr para 80 yardas y un touchdown. San Francisco terminará como primer sembrado por segunda vez en los últimos cinco años.