“Yo le voy al Necaxa”. La frase característica de Don Ramón, uno de los aficionados más conocidos en la historia de los Rayos, aunque pocos conocen la razón de su afición por el club.

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Alex Águinaga, uno de los mejores jugadores del equipo en los años 90, contó que conoció a Don Ramón y sabía que tenía un banderín del Necaxa en su casa, pero no estaba seguro de que realmente fuera un fanático del club.

“Tuve la suerte de conocer a Don Ramón y no sé si en realidad era hincha del Necaxa. Aunque tenía el banderín atrás en su casa. Quien si le iba a ese equipo era Florinda Meza (“Doña Florinda). Siendo muy aficionada, pese a que Roberto Gómez, Chespirito, le iba al América”, declaró.

Esto debido a que los Rayos desaparecieron entre 1971 y 1982 -pues fueron vendidos por Julio Orvañanos y durante aquellos años se llamó Atlético Español-, misma época donde se grabó ‘El Chavo del 8’. Sin embargo, el hecho de decir: “yo le voy al Necaxa” era sinónimo de: “soy muy hombre valiente”.

En dicha época, aquel que presumiera ser fan del Necaxa, era algo así como ser una persona envalentonada y sin miedo a nada. Ya que proclamaban tener afición por un equipo inexistente en ese entonces.

“Lo hacía para demostrar su hombría y que sólo le gustaban los de su equipo, que no lo cambiaran de ese grupo. Así, esa frase se hizo ícono en muchos lugares del mundo”, remató.

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