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14, julio 2023 - 6:00

┃ José Ángel Rueda

Germán Sánchez lleva su máscara de luchador a todas las competencias.FOTO_ LUIS GARDUÑO

En la mochila, el clavadista Germán Sánchez lleva guardada una máscara de Lucha Libre. Mientras él sube a la plataforma, el pedazo de tela rojo con vivos azules lo acompaña a la distancia, como una forma de recordarle todo aquello por lo que lucha, su familia, su hijo y los sueños de trascender en su deporte.

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“Siempre que llego a veces bien cansado del entrenamiento, mi hijo me dice ‘papi, luchas, luchas’, y pues ahí me tienes, dándole un ratito en la cama, entonces esto significa mucho, más que simplemente el deporte, es muy significativo para mí”, cuenta a ESTO.

A sus 31 años de edad, el deportista tapatío ha crecido a la par de las plataformas. No es el mismo que a los 19 años ganó una medalla de plata en los Juegos Olímpicos de Londres 2012, junto a Iván García. Los años han pasado, ahora tiene una familia y la cuestión física cuesta más que antes. Eso no detiene al “Duva”, al contrario, encara el ciclo olímpico con la ilusión de llegar a lo que serían sus terceros Juegos Olímpicos, es decir, el escenario que le permitiría lucha por su tercera presea, tras la ya mencionada de Londres y la de Río 2016, cuando se llevó la plata en individual.

“Es lo que quiero, sé bien donde estoy parado, sé que van a ser quizá mis últimos Juegos Olímpicos, por eso es que le estoy invirtiendo y le estoy echando todas las ganas, estoy haciéndolo de la forma más consciente, en San Salvador opté por unos clavados más sencillos, para no meterle tanta carrilla al cuerpo, ser inteligentes. Ahorita que regrese a México haré otra preparación, para involucrar los clavados de mayor nivel de dificultad, seguir caminando, confiando y creyendo en cumplir el sueño de estar en París”.

SAN SALVADOR FUE SOLO EL INICIO PARA GERMÁN SÁNCHEZ

Tras el selectivo único realizado a finales de abril, “Duva” tuvo su primera competencia en forma en los Juegos Centroamericanos de San Salvador 2023. El clavadista terminó en el quinto lugar en la prueba individual desde la plataforma de 10 metros y logró subir al podio junto a Diego Balleza, en los sincronizados, al terminar en tercer lugar. Lejos de los resultados, el hecho de volver a sentir el vértigo de las competencias representó un paso importante para lo que viene. En el camino están los Juegos Panamericanos de Santiago 2023, como la segunda parada rumbo a París.

“Estar en Juegos Centroamericanos fue un gran comienzo, me lo propuse a principios del año, hacer todo el proceso para poder estar, sé que es parte importante de un proceso donde estoy ganando confianza, mucha seguridad para lo que quiero hacer más adelante. Este 2023 hay que estar pendientes de las próximas fechas de selectivos, porque está el selectivo rumbo a Panamericanos, puede que este año sea el selectivo para lo que es la Copa del Mundo, hay que estar pendientes de las próximas fechas y se conscientes de a dónde le vamos a apostar”.

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La gente en las tribunas de la fosa de clavados en San Salvador reconoció el esfuerzo del doble medallista olímpico. Germán respondió con la clásica sonrisa que lo caracteriza, una forma de agradecerle al destino el hecho de poder estar ahí, en una plataforma, en busca de su sueño. “Yo venía a disfrutar, a gozar esto, yo estuve literal en cama, he estado en hospitales, de pronto le hablaba a mi esposa por teléfono para decirle que ya me había lastimado, entonces ahorita, poder estar saltando, hace que me sienta lleno de felicidad y trato de transmitir eso”.