El Calor de Miami en el último cuarto aguantó los manguerazos de Nikola Jokic, quien terminó con un doble-doble, para quedarse con el importante triunfo por 111-108. Con esto el Heat demostró que puede triunfar en cualquier duela, mientras que se comprobó que Nuggets no es invencible ante su afición. Se empataron las Finales de la NBA 1-1 y la historia continuará el miércoles en Florida.

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Volcadas, lluvia de triples, un segundo duelo de la serie emocionante se apreció en el Ball Arena. Las dos quintetas no defraudaron, se enfrascaron en una batalla de intercambio de golpes. El Heat más necesitado de arrebatar un triunfo en patio ajeno comenzó mejor. Max Strus lució con cuatro triples en el primer episodio y la visita llegó a tener diferencia de 11 puntos.

El Calor de Miami comenzó sofocante, más incisivo con buen tino desde el perímetro. No obstante, el daño poco a poco fue apaciguado por Jokic. Sin tanto protagonismo, colaboró con 11 puntos en el primer episodio, mientras que Butler apenas encestó cuatro y la disparidad fue de tres puntos. 23-26 favorable a los de Florida.

En el segundo episodio, Nuggets se despabiló. Jamal Murray brilló con canastas y amagues en la cara de Butler. Se dio un festín para remontar el partido ayudado con los triples de Brown y Green, lo que permitió tener una diferencia de hasta 15 puntos. Antes del descanso Miami recortó distancias de la mano de Vincent, Butler y Adebayo para terminar 51-57 con ventaja para los pupilos de Michael Malone.

La intensidad aumentó en el tercer capítulo, hasta la adrenalina se elevó en las protestas. Los manejados por Erik Spoelstra iniciaron mejor y con dos tiros libres de Adebayo el duelo se puso 64 iguales.
Jokic, bien respaldado por Porter Jr. y Gordon, superó la barrera de los 30 puntos y Denver siguió en ventaja 83-75 rumbo al último episodio.

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Miami jamás se achicó, triples de Robinson y Vincent ayudaron a la remontada 86-85 en un momento de distracción por parte de Denver, donde hasta Jokic cometía faltas a la ofensiva. 90-85 se puso el electrónico con menos de nueve minutos por disputarse. Los despistes continuaron en los Nuggets lo que propició que el Calor de Miami volviera a calentar para alejarse a 11 puntos (104-95) tal y como ocurrió en el primer capítulo. Denver tuvo la capacidad de acercarse, rozó el empate para el obligar al tiempo extra, pero el último tiro de tres de Murray no entró y todo acabó 111-108 favorable a la visita, que en los próximos dos partidos será local.