El deseo de los tifosi era ver ganar a uno de los dos coches Ferrari con Charles Leclerc o Carlos Sainz para vivir un Gran Premio de Italia al máximo, sin embargo, el plan no fue así y se tuvieron que conformar con el segundo sitio del monegasco y la victoria del neerlandés Max Verstappen, de Red Bull, misma que fue opacada por la aparición del Safety Car en las últimas vueltas.

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Lo anterior provocó que los aficionados del cavallino rampante abuchearan en todo momento a “Mad Max” una vez que bajó de su auto para festejar el triunfo y después a la hora de dar sus declaraciones respecto al primer lugar.

Como todo un profesional, más allá de incomodarse, Max entendió el malestar de los seguidores transalpinos que deseaban la victoria de Ferrari, así que todo pasó como si nada.

“Sucede, todo el mundo me habla de ello con los abucheos y esas cosas, pero al final del día estoy aquí para tratar de ganar la carrera que hemos hecho”, dijo.

La desaprobación de la mayoría de los fanáticos que llenaron las gradas del Autódromo Nazionale di Monza para nada le estropearon el triunfo número 31 de su trayectoria en el “Gran Circo”, undécimo de esta campaña 2022 y quinto de manera consecutiva, lo que le permitió dar un paso importante para el bicampeonato.

“Algunas personas, por supuesto, no pueden apreciar eso porque son fanáticos muy apasionados por un equipo diferente. Es lo que es. No va a estropear mi día, solo estoy disfrutando del momento”, afirmó el neerlandés, de 24 años.

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