El domingo 1 de junio de 1997 quedó marcado en la historia del ex delantero de Chivas, Gustavo Gusano Nápoles porque anotó cuatro goles en la Final de vuelta del Torneo Verano 97.

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El famoso Gusano Nápoles fue una pieza fundamental del rebaño Sagrado para llevarse el campeonato antes de que el empresario Jorge Vergara comprará al cuadro tapatío. 

Tras conseguir el título, Gustavo Nápoles con un cartel goleador fue cedido al Atlante, en el torneo Invierno 1998 y en el Invierno 2000 donde militó con América y Celaya, sin embargo los goles no cayeron con sus nuevos equipos.

Luego de dos años, el Gusano regresó al equipo Rojiblanco, pero ya no fue lo mismo, ese olfato de gol se perdió. En el 2002, salió al cuadro de los Jaguares de Chiapas, después pasó al León, para ponerle fin a su carrera profesional con el Puebla en el ya lejano Clausura 2004.

PROBÓ SUERTE EN EL EXTRANJERO

Cuando se esperaba que dijera adiós a las canchas, Gustavo Nápoles, probó suerte en el fútbol ecuatoriano con el cuadro Espoli, donde solo jugó seis meses.

Un año después, en el 2007 regresó a México y se enroló con el conjunto de los Tigres de Los Mochis, equipo filial de los Tigres. En el balompié de ascenso, participó en 14 juegos y solo consiguió una sola anotación. Esa fue la última vez que jugó de manera profesional.

TÍTULO COMO AUXILIAR TÉCNICO

Tras retirarse, el Gusano Nápoles decidió incursionar como auxiliar técnico junto con Joel Tiburón Sánchez en el Coras FC de la Liga de Ascenso en el torneo Apertura 2014, donde lograron coronarse.

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