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16, junio 2022 - 6:00

┃ Cristobal Morales

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CRISTÓBAL MORALES 

FOTO | ESPECIAL

A pesar de que existen decenas de grandes jugadores mexicanos que han hecho carreras excepcionales, muy pocos se atrevieron a dar el salto al futbol europeo para mostrar de qué estaban hechos al más alto nivel futbolístico. Nombres como Hugo Sánchez, Rafael Márquez, Javier Hernández, Andrés Guardado y Héctor Herrera han sido los que mejor han rendido en el Viejo Continente, sin embargo, existe una lista a la que incluso históricos de la Selección Mexicana pertenecen: los grandes fracasos mexicanos en Europa. 

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Si ponemos en contexto que por casi 40 años ningún mexicano jugó en Europa hasta el fichaje de Hugo Sánchez por el Atlético de Madrid en 1981, la lista de jugadores no es tan grande como la de otros países sudamericanos, sin embargo, lamentablemente la gran mayoría fracasa. Puede ser la mentalidad o el talento, pero por distintos factores, estos mexicanos no pudieron brillar en el mejor futbol del mundo y tuvieron que regresar antes de lo planeado a nuestro futbol.

Luis Flores: el goleador de los Pumas fue uno de los más destacados del Tri durante el Mundial de México 1986, razón por la que fue fichado por el Sporting de Gijón y con una buena campaña de 12 goles, se esperaba que fuera comprado por el club español, sin embargo el club prefirió no hacer válida la opción de compra y sólo un año después de su partida, retornó a la Liga MX con los universitarios. Un año más tarde lo intentaría de nuevo al ser fichado por el histórico Valencia, pero de igual manera terminaría regresando a la Liga MX.

Manuel Vidrio: el defensor surgido en la cantera de Chivas fue llamado por Javier Aguirre en 2002 para jugar en el Osasuna, club al cual el Vasco dirigió una vez terminada su primera aventura con el Tri. El fichaje fue todo un fiasco luego de que Vidrio sólo jugara 5 partidos durante la temporada y a pesar de contar con la confianza del entrenador mexicano, los números no justificaron el respaldo de Aguirre con la directiva.

Carlos Ochoa: fichado al igual que Vidrio por Javier Aguirre en el 2002 para el Osasuna. Ochoa venía de anotar 11 goles con Tigres durante 2001, sin embargo una vez enfundado en la casa del equipo de Pamplona, decepcionó y terminó por ser uno de los peores fichajes en la historia del club español. Sólo jugó dos partidos en España y se regresó a los seis meses a México.

Sergio Almaguer: en 2003 jugó solamente siete partidos oficiales al ser fichado con el club turco Galatasaray, cuatro de liga y tres de Champions League, pero a pesar de las oportunidades, jamás logró acoplarse al futbol de aquel país y terminó regresando a los seis meses para jugar con los recien creados Jaguares de Chiapas, club en el cual terminaría retirándose.

Jared Borgetti: uno de los mejores delanteros en la historia de nuestro país y por muchos años, el máximo goleador de la Selección Mexicana, sin embargo una vez que fichó por el Bolton Wanderers de la Premier League, la magia se fue y a pesar jugar 19 duelos con el club inglés, nunca pudo consolidarse en el club y salió por la puerta de atrás con rumbo al futbol arabe.

Francisco Fonseca: luego de su gran actuación en el Mundial de Alemania 2006, Fonseca fue contratado por el histórico Benfica y todo pintaba para ser una de las mejores historias de un mexicano por Europa, sin embargo el resultado fue todo lo contrario, pues a sólo seis meses de su llegada, volvió a la Liga MX con sólo 15 partidos jugados y 5 goles anotados en el futbol luso.

Omar Bravo: el máximo goleador en la historia de las Chivas también tuvo su oportunidad de demostrar su talento en el futbol europeo y gracias al buen nivel que mostró de 2006 a 2007 entre selección y club, el Deportivo La Coruña decidió ficharlo de manera gratis como recomendación de Andrés Guardado, quien un año antes había llegado al club gallego. La falta de minutos en duelos importantes y el bajón anímico que Bravo tuvo en su paso por España, fue razón suficiente para que terminara rescindiendo su contrato con el club tras seis meses, en los que jugó 20 partidos y sólo anotó en tres ocasiones.

Carlos Peña: llegó como fichaje de Pedro Caixinha al Rangers de Escocia, un club histórico del futbol europeo y a pesar de la confianza mostrada por el entrenador portugués ex de Santos, el famoso Gullit decepcionó y optó por regresar a los seis meses al futbol mexicano después de 12 partidos jugados y 4 goles anotados.

Si nos damos cuenta en todos los jugadores antes mencionados, ninguno logró pasar la barrera de los primeros seis meses en sus respectivos equipos y es ahí donde les dejamos la pregunta: ¿fracasaron por falta de talento o por una pobre mentalidad?

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