JOSÉ ÁNGEL RUEDA

“A mí dame estos sufrimientos y me quedo aquí, no tengo problema”, respondió el “Vasco” Aguirre al reportero del Mallorca apenas unos minutos después de conseguir la permanencia. La frase deja ver la personalidad del estratega mexicano, que a lo largo de los años ha encontrado en el sufrimiento un buen lugar para estar.

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Aunque en Javier parece fácil, no lo es. El “Vasco” responde a los momentos de presión con su impulso dicharachero, como si en la gracia de la palabrota habitara una esperanza. Esa capacidad de apagar el fuego lo ha convertido en el bombero por tradición del futbol español; los equipos condenados al descenso recurren a él con la esperanza de que su discurso le llegue al futbolista, y casi siempre es así.

Con la salvación del Mallorca ya son cuatro los equipos que el “Vasco” ha rescatado de la hoguera, de ahí el perfil de técnico milagro. La tradición del mexicano en el futbol ibérico viene desde el 2002, con el Osasuna, aunque ya antes había mostrado sus cosas con la Selección Mexicana, equipo al que salvó del descenso a los infiernos que supone quedarse fuera de una Copa del Mundo.
Una vez completada la obra y disputar con México el Mundial de Corea-Japón 2002, el estratega mexicano viajó al Reino de Navarra para dirigir en la campaña 2022-2003 al Osasuna, equipo que una temporada antes había finalizado en el lugar 17 de la tabla, apenas dos puntos arriba de la zona del descenso.

Javier, valiente. no temía, al contrario, el “Vasco” trabajó con la tranquilidad propia de quien confía en sus posibilidades y lejos de sufrir con temas de permanencia, el mexicano mantuvo al equipo en media tabla durante tres temporadas hasta llevó a los suyos a la zona de Champions League, con un cuarto lugar que escenifica una de las grandes gestas del futbol español.

Años más tarde, tras dirigir algunas temporadas al Atlético de Madrid, el “Vasco” retomó su labor de salvador con el Zaragoza, equipo que lo llamó para salvar el barco. Aguirre llegó con la temporada 2010-2011 iniciada, sin embargo, no falló en su intento de mantener al equipo en la máxima categoría. Durante su primera campaña finalizó en el lugar 13, mientras que en la segunda batalló un poco más, al culminar en el puesto 16.

Apenas una temporada más tarde Javier Aguirre llegó al Espanyol de Barcelona, equipo que había transitado por la media tabla durante las recientes campañas. Su labor fue muy parecida a lo hecho con el Zaragoza, al mantener a los “Pericos” en la Primera División, más allá de no poder mejorar su posición en la clasificación.

SE QUEDÓ CERCA

Con el prestigio de haber salvado a tres equipos de la quema del descenso, Javier Aguirre tomó las riendas del Leganés en noviembre de 2019. A su llegada, el equipo apenas tenía una victoria y estaba hundido en lo más bajo de la tabla. Aunque no fue fácil, de a poco el “Vasco” le encontró la forma al equipo y logró sacar siete victorias, dos de ellas en la antepenúltima y penúltima jornada.
La resurrección final le permitió al Leganés llegar a la última jornada con posibilidades de salvación, pero un empate 2-2 con el Real Madrid los mandó a la segunda división. El “Vasco”, desesperado en la banda, observó cómo sus jugadores perdían las oportunidades más claras, como si la fortuna les hubiera dado la espalda. Al final se quedaron a un punto de la salvación.

SALVÓ AL MALLORCA

Cuando el Mallorca parecía condenado, apareció Javier Aguirre. El “Vasco” apenas dirigió nueve partidos, pero cuatro victorias fueron suficientes para obrar el milagro. Ni la derrota 2-6 ante el Granada, rival directo en la lucha, mermó las ilusiones del equipo, que se encomendó a la fuerza de su técnico para mantener la categoría.

EQUIPOS A LOS QUE AGUIRRE SALVÓ DEL DESCENSO
OSASUNA
ZARAGOZA
ESPANYOL
MALLORCA

EQUIPOS A LOS QUE AGUIRRE NO SALVÓ DEL DESCENSO
LEGANÉS

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