Josué Padilla Márquez

FOTO: PAUL ELLIS | AFP

La final de la UEFA Champions League ya tiene a su primer invitado. Liverpool fue a la casa del Villarreal y supo sufrir en los momentos más críticos, para terminar derrotando en la Cerámica al Submarino Amarillo, que se vio muy cerca de la disputa por el título en esta edición.

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Los Reds se impusieron en el encuentro de vuelta por 3-2, luego de que estaban abajo en el marcador por 2-0. Al final, el equipo inglés terminó derrotando 5-2 en el global y así amarró su lugar en París, sede de la gran final.

El partido desde antes de jugarlo parecía que estaba cargado para un lado. El Villarreal con su gran espíritu dio una gran lección en el futbol y apenas en los primeros minutos de juego, Boulaye Dia se encontró un balón en el área y lo mandó a guardar, lo que generó una locura total en la casa del equipo español.

Con ilusiones renovadas, el ‘Submarino’ lo intentó con pases filtrados, centros y muchos recursos, pero la defensa y Alison Becker impidieron que la ventaja se les fuera tan fácil.

Minutos antes de que acabara el primer tiempo, el Villarreal dio un nuevo golpe de autoridad y un remate de Coquelin le dio la paridad en el global al equipo amarillo.

Para la segunda parte, Liverpool comenzó a presionar muy fuerte y esto les dio resultado. Fabinho disparó a puerta y un error de Gerónimo Rulli puso en ventaja en el global nuevamente a los ingleses.

El Villarreal comenzó a desinflarse y minutos después, Luis Díaz encontró un centro completamente solo y nuevamente el portero amarillo no pudo contener el balón.

Esto dejó básicamente desahuciado al Villarreal y Mané puso el definitivo. Liverpool estará nuevamente en una final de Champions League y espera rival entre el Real Madrid y el Manchester City.

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