La FIFA mostró su satisfacción por la decisión de los nuevos responsables de la Comisión Independiente de Ética del organismo, María Claudia Rojas y Vassilios Skouris, de publicar el denominado “Informe García”, que investigó la concesión de los Mundiales de 2018 y 2022 a Rusia y Qatar, respectivamente.

“En aras a la transparencia la FIFA da la bienvenida a la noticia de que este informe sea publicado ahora finalmente”, señaló el organismo en un comunicado, en el que recordó que su presidente, Gianni Infantino, pidió “en numerosas ocasiones en el pasado” la publicación del documento y con el respaldo del Consejo desde la reunión que mantuvo en mayo de 2016 en Ciudad de México.

En su texto, la FIFA recordó que los anteriores responsables de las dos cámaras -investigación y resolución- que forman la Comisión de Ética, Hans-Joachim Eckert y Cornell Borbély, quienes cesaron en el Congreso de FIFA de este año, “siempre rechazaron su publicación”.

Este mismo motivo fue el que generó la renuncia del autor del informe, el exfiscal estadounidense Michael J.García, quien tras elaborarlo abandonó su cargo como responsable del órgano de investigación de dicha comisión en diciembre de 2014 al ver frustrado su deseo de hacer público el mismo por el rechazo de quienes eran sus compañeros en la misma.

Meses después, en junio de 2015, la FIFA vivió la crisis más grande de su historia con la detención de varios de sus directivos en Zúrich, en vísperas del Congreso anual acusados de corrupción por la justicia de Estados Unidos, lo que llevó a la renuncia del suizo Joseph Blatter como presidente, cargo que ocupaba desde 1998.

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La investigación de Estados Unidos y de la justicia suiza provocó meses después, en diciembre de 2015, nuevas detenciones de responsables y exdirigentes de la organización, algunos de los cuales han reconocido su culpa y otros están a la espera de juicio.

Pese a la satisfacción por la publicación del documento, la FIFA precisó que el hecho de que éste se haya filtrado al diario alemán “Bild” es lo que ha llevado a los nuevos responsables de la Comisión de Ética a decidir su inmediata publicación para evitar especulaciones sobre su contenido.

La nueva Comisión de Ética Independiente, liderada por la colombiana María Claudia Rojas y el griego Vassilios Skouris al frente de las cámaras de investigación y resolución, respectivamente, se reunirá la semana que viene y ya tenía previsto debatir sobre la publicación del informe.

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Las 430 páginas que vieron la luz este martes repasan la actuación de las candidaturas que optaron a aquella elección, el 2 de diciembre de 2010 en Zúrich, y la relación que pudieron tener entre ellas mismas y con los miembros que formaban entonces el Comité Ejecutivo que era el encargado de votar. Ahora la elección de las sedes mundialistas corresponde al Congreso.

Uno de los posibles acuerdos entre candidaturas que investigó García, que empleó año y medio en elaborar el documento tras entrevistarse con 75 testigos, fue el de la Ibérica, que formaban Portugal y España, aspirante a 2018, y Qatar, que logró ser sede en 2022.

No obstante el informe señala que pese a quedar demostrado que entidades de Qatar, incluida la candidatura, tenía conexiones con el fútbol de España “no se ha encontrado evidencia alguna vinculando estos viajes o relaciones con cualquier arreglo de voto inapropiado”.

El documento sí cuestiona actitudes que persiguieron favores personales durante el proceso, algunas protagonizadas por integrantes entonces del Comité Ejecutivo.

La elección de las sedes mundialistas para 2018 y 2022 se celebró el 2 de diciembre de 2010. Primero se votó el escenario para 2018 y en la primera ronda Inglaterra recibió dos respaldos, Holanda/Bélgica cuatro, España/Portugal siete y Rusia nueve.

En la segunda, la candidatura de Holanda/Bélgica obtuvo dos votos, la Ibérica siete y Rusia trece.

Para 2022 hicieron falta cuatro rondas. En la primera cayó eliminada Australia con un solo voto; Japón y Estados Unidos recibieron tres, Corea del Sur cuatro y Qatar once.

En la segunda Japón se despidió con dos votos; Corea del Sur y Estados Unidos cinco y Qatar 10.

En la tercera Corea del Sur, con cinco respaldos, fue eliminada. Estados Unidos logró seis y Qatar once.

Y en la cuarta y última Qatar venció y logró la mayoría absoluta con catorce votos, por ocho de Estados Unidos.