Tuvieron  que llegar hasta los penaltis para que los Tigres doblegaran al América en la final del Apertura 2016 y se hicieran de su quinta estrella en su historia. Con Nahuel Guzmán como su figura, después de detener tres disparos desde lo once pasos, el conjunto neoleonés se hizo del cetro, en un encuentro de vuelta cardiaco, ya que el América tenía el campeonato en las manos a dos minutos del final, con el gol de Edson Álvarez, pero Dueñas, con su cabezazo certero, puso las cosas tablas, en el estadio Universitario, que fue un Volcán en erupción la noche de ayer domingo con la proclamación de campeón de su escuadra. Como hace un año, el norte se vuelve a hacer de un título, y fue gracias a Nahuel, Gignac y compañía.

LO EMOTIVO

La fiesta que se vivió en el estadio Universitario, contrastante con lo ocurrido en el Azteca, pues la gente de Tigres alentó desde el primer minuto a su escuadra y se hizo presente en el encuentro con cánticos, porras, y cuando los de “Tuca” Ferretti más lo necesitaba lo alentó para ir al frente y empatar el encuentro; en los penaltis fueron decisivos, pues animaron a Nahuel a detenerlos.

También puedes leer:  ¡Histórico! Los cinco títulos de Tigres

LO BUENO

EL fuelle físico del América, del que siempre se dudó cuando regresó de Japón, pues aunque ya en los tiempos extra mostraban cansancio, nunca cejaron en el esfuerzo y estoicos aguantaron el trajín de una final, en la que fueron exigidos en serio por los felinos norteños, que terminaron por sacar mejor provecho desde los once pasos.

LO MALO

La final de la Liga, la semifinal de Copa MX, además del juego por el tercer lugar en el Mundial de Clubes, los perdió el América en tiros de penaltis. Antes, contra las Chivas empataron 1-1 en tiempo regular, pero cayeron 4-3 en tiros desde los 11 pasos. Igual ante el Atlético Nacional, en el partido por el tercer lugar, y ayer, ante los Tigres, empataron 1-1 en tiempos extra y no atinaron ninguno de los tres disparos para perder 3-0 en los tiros.

 También puedes leer: ¡Erupción de gloria! Tigres, Campeón del Apertura 2016

LO FEO

La gresca que armaron Gignac y Ricardo La Volpe, que desencadenó una serie de golpes volados por parte de las bancas de ambos equipos y en la que la “Palmera” Rivas, como gladiador del pancracio, repartió golpes a diestra y siniestra, hasta ser expulsado del encuentro. Aunque le puso sabor a la final, este tipo de actos no deberían tener lugar. Ni el francés ni el “Bigotón” fueron siquiera amonestados.