La historia reciente de los Pumas ha sido compleja, la sequía sin títulos cada vez se hace más pesada y recordar oportunidades de oro que tuve el equipo le abona un sentimiento de frustación colectiva entre sus aficionados. Quienes hay un día en el calendario que recuerdan con tristeza.

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La razón por la que aficionados de los Pumas odian dicha fecha se debe a una coincidencia, pues un 13 de diciembre pero de 2015, Universidad Nacional vio cómo Tigres dio la vuelta con el trofeo de la Liga MX en el Olímpico Universitario.

Era con el pie, Fidel

Aquella final se trató de una de las más épicas en la historia de la Liga MX, pues Pumas remontó un 0-3 en contra contra uno de los planteles más poderosos del futbol mexicano. La afición universitaria no tenía gran expectativa sobre el partido de vuelta tras el paseo que sufrió el equipo auriazul en el Volcán.

Cuando parecía que Pumas que se quedaba corto en la remontada, Silvio Torales metió un gol que le dio esperanza a los universitarios. Lo que llamó la atención en aquel gol fue que el paraguayo entró de cambio en un torneo en el que no tuvo ni 300 minutos de juego en todo el partido.

Con el empate en el global parecía que la mesa estaba puesta para Pumas para dar la estocada. No obstante, una jugada desafortunada marcó el destino para los auriazules.

Tras un centro de Ismael Sosa por la banda derecha, dejó a Fidel Martínez solo frente a la portería quien se decidió por rematar de cabeza. Tras dicho remate, Nahuel atajó y el balón quedó a la deriva cerca de la línea de gol de la portería; lo que desombocó en otra jugada desafortunada, la expulsión de Herrera tras una entrada a destiempo sobre Briseño.

La expulsión cambió la inercia del juego, cuando parecía que Pumas se llevaba el título, Gignac volvió a darle ventaja a Tigres y al poco tiempo de terminar el tiempo extra, Alcoba mandó a penales, donde los auriazules no pudieron ante Nahuel Guzmán.

La otra final que perdió Pumas en 13 de diciembre

En otro fatídico 13 de diciembre para Universidad Nacional fue el de 2020, año pandémico donde el equipo del Pedregal sorprendió a más de uno con un Guardianes 2020 muy efectivo. Cabe mencionar que en el aquel torneo Luis Michel abandonó al equipo a su suerte a unos días de empezar el torneo.

Andrés Lillini entró al quite y dejó al equipo sublíder con 32 puntos en total, el equipo eliminó a Pachuca en cuartos de final y remontó a la Máquina en “la madre de todas las cruzazuleadas” al remontar cuatro goles en total.

Ya en la final, Pumas llegó al Nou Camp con un marcador global de 1-1, el León de Nacho Ambriz salió como favorito y cumplió con las expectativas al vencer a los universitarios. Donde en dicha final, el hombre que fue clave en todo el torneo para los auriazules, Alfredo Talavera, tuvo un error terrible que los dejó sin la octava.

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Este 2025 el equipo universitario quiere dejar atrás el mal augurio del 13 de diciembre y firmó al centro delantero Juninho procediente de Flamengo, esperando que se convierta en el killer del Pedregal.