30, noviembre 2025 - 16:45
Texans derrota a los Colts foto_ Reuters
El buen momento que vivían los Colts estuvo siempre acompañado por una sombra de duda. ¿Era Indianápolis capaz de mantener la racha que lo colocaba como un contendiente? Tras derrotas en fila, una ante Chiefs y la última ante los Texans, por un apretado 20-16, parecen encaminar una respuesta.
Se sabía que el reto para los Colts ante la que es considerada la mejor defensiva de la NFL era mayúsculo. Y más si se trata de un rival divisional que le pisa los talones en busca de la cima del sur de la AFC.
El partido fue como se esperaba, con ambas defensivas por encima de las jugadas explosivas de los ataques, aunque en esa labor fueron los Texans quienes mejor se adaptaron a las circunstancias para llevarse la victoria y colocarse a tan solo un triunfo los Jaguars y Colts, líderes de la división.
¿Cómo fue la victoria de los Texans?
CJ Stroud, quien había estado ausente desde el pasado 2 de noviembre, tuvo un arranque relativamente lento, pero fue de menos a más. El mariscal de campo terminó con 276 yardas y una intercepción. Eso no evitó que moviera el ovoide para poner a su equipo en zona de puntos y propiciar el juego por tierra. Los Texans liquidaron el encuentro con carreras de Chubb y Collins y dos goles de campo de su pateador Ka’imi Fairbairn.
Más allá de lo hecho por el ataque de los Texans, fue su capacidad para frenar a los Colts en momentos determinantes lo que le permitió llevarse la victoria. Por grandes lapsos del partido Indianápolis pareció encontrar el camino para mover el ovoide. Incluso el mariscal de campo Daniel Jones logró lanzar dos pases de touchdown a Alec Pierce y su ala cerrada Tyler Warren.
El jugador más prolífico del ataque fue su corredor Jonathan Taylor, quien terminó el partido con 121 yardas totales, aunque no logró ingresar a la zona prometida, para sumar su segundo encuentro consecutivo sin touchdown.
A pesar de que Indianápolis siempre se mantuvo en posición de empatar el partido o incluso ganar el duelo en el último drive, la ofensiva no encontró la manera de poner los puntos necesarios y el partido terminó en favor de los Texans. El resultado no escapó de la polémica, porque un punto extra de los Texanos que parecía malo fue marcado como bueno y ese punto evitó que los Colts buscaran el empate con un gol de campo.
El regreso de Aaron Rodgers no le alcanzó a los Steelers para ilusionarse con un triunfo que les hubiera permitido recuperar el liderato de la división Norte de la Conferencia Americana. En el choque más atractivo de la jornada dominical en la accidentada Semana #13, los Buffalo Bills sacaron un valioso triunfo (26-7) en su visita a Pittsburgh.
Tras haberse perdido el partido previo por una fractura en la muñeca, A-Rod volvió a la actividad y lo hizo con una discreta actuación, donde incluso fue abucheado por sus propios aficionados en el Acrisure Stadium. El veterano pasador de 41 años intentó 21 pases de los cuales completó 10 para 117 yardas, sin touchdowns ni intercepciones.
Sabedor de lo limitado que estaba su QB, el coach Mike Tomlin ideó un plan de juego defensivo donde únicamente le permitió al poderoso ataque de los Bills un gol de campo durante la primera mitad. A Pittsburgh le salió lo planeado a la perfección, pero todo se desmoronó en los primeros minutos del complemento.
Tras un parcial de 3-7 en los dos primeros episodios. La visita anotó 13 puntos sin respuesta en menos de siete minutos, aprovechándose de un par de errores de su rival. Primero con un balón suelto y posteriormente con una intercepción lanzada por el suplente Mason Rudolph. Mismos que fueron capitalizados por Buffalo para ponerse nueve puntos arriba (16-7).
La reacción no llegó por parte de los Steelers. Los abucheos se empezaron a escuchar con más fuerza con el pasar de los minutos y Buffalo capitalizó para un nuevo touchdown. En esta ocasión por conducto de Josh Allen por la vía terrestre.
La diferencia ya era de tres posesiones, imposible de remontar para un ataque que le costó mover las cadenas a lo largo de todo el encuentro. Una de las claves en el éxito de los Bills pasó por su fortaleza terrestre, donde superaron la barrera de las 250 yardas. Liderados por las 144 de James Cook.
Con este resultado, Buffalo mejoró su registro a 8-4, dos victorias por detrás del líder (Patriots) de la división Este de la AFC. Quedándose de manera momentánea con el último comodín rumbo a los playoffs. Por su parte, Pittsburgh hiló derrotas y ha perdido cuatro de los seis más recientes. Para mantenerse en la segunda posición del Norte de la misma Conferencia con marca de 6-6, la misma que Baltimore.
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