26, octubre 2025 - 16:09
Los fans viven el GP de México desde su casa foto_ Lesslie Arredondo
La posibilidad de adquirir una entrada para el Gran Premio de México se reduce a la posibilidad económica y la suerte que los aficionados deben de tener para conseguir el ansiado ticket.
En el caso del edificio ubicado exactamente en la curva 15, la situación es distinta. Sobre todo porque una parte de la pista puede observarse de buena manera en la azotea del inmueble.
Iván, su familia y amigos aprovechan la cercanía para armar una fiesta en pleno día de la carrera. Los tacos, las bebidas y el buen ambiente son las características de una terraza que respira la Fórmula 1 de otra manera.
Los motores suenan como si estuvieras dentro del autódromo, la gente se deleita con televisión que se pone para ver la carrera y el precio, mucho más económico que adentro. Da para que todos salgan contentos y bien comidos.
Los fans subieron a sus azoteas para ver el Gran Premio de México
En el arranque, todos se quedaron al frente del televisor. El primer aceleramiento de los carros se escuchó con todo y muchos de los presentes se emocionaron al ver que poco a poco avanzaban rumbo a la curva que se puede observar.
“Quiso emular a Checo”, se escuchó luego de la forma en la que Max Verstappen arrancó. Las risas y la camaradería no faltaron. Algunos sacaron sus binoculares para observar lo más de cerca posible a los competidores.
La presencia de Sergio Pérez no podía quedarse de lado. Un peluche del Checo y hasta uno de sus antiguos uniformes, con el 11, cuando competía para RedBull, estuvieron en el lugar. Seguramente, ahora con su llegada a Cadillac, todos cambiarán sus prendas para apoyar al piloto mexicano. Quien regresará para la próxima campaña a la competencia élite del automovilismo.
Foto: Lesslie Arredondo
Las vueltas continuaron y la gente no se podía despegar. Algunos desde la parte alta y otros desde la televisión, lo importante era emocionarse con la pasión de los autos y pasar un domingo distinto al que la rutina los tiene acostumbrados.
Contentos, al finalizar la carrera, todos se quedaron amontar una pequeña fiesta que terminó temprano, ya que el lunes todos tendrían que volver a sus actividades-. Aunque con el recuerdo de que vivieron un domingo lleno de velocidad.
El aforo en esta ocasión fue menor. Iván confirmó que algunos amigos no pudieron llegar por el fallecimiento de un familiar y, pese a que mandó pronta resignación a los familiares de sus amigos, no quiso dejar al resto sin la ya tradicional reunión.
Así se vivió la fiesta de la Fórmula 1 desde la azotea que da directamente a la curva 15 del autódromo. El entusiasmo por los motores y la camaradería se apoderó. De nueva cuenta, de todos los que se dieron cita en una azotea llena de felicidad.
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