Error, tras error, tras error… esa fue la noche de Chivas en La Corregidora. Ante el Querétaro, los rojiblancos cometieron una desatención en defensa y de paso desaprovecharon varias oportunidades al ataque para ver caer su racha positiva de triunfos con un sobrio 1-0.

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El quinto triunfo no pudo ser para el Guadalajara, mismo que les hubiera dado la posibilidad de meterse a zona de Liguilla directa al menos hasta la siguiente jornada. Ni la pasividad de Gallos Blancos en la recta final y los demasiados cambios de Gabriel Milito fueron suficientes para evitar la derrota tapatía.

La noche comenzó de forma adversa para los Chivahermanos. El ‘Oso’ González perdió la pelota en el mediocampo y los locales aprovecharon para descolgar su ataque. Un disparo raso fue rechazado por Rangel, pero para su mala fortuna el rebote cayó justo en los pies de Ali Ávila, quien solo tuvo que impactar el esférico para adelantar a Gallos apenas al segundo minuto de juego.

Milito no dio crédito de como su defensa que solo había recibido un gol en sus últimos tres encuentros se vio mancillada tan temprano en el duelo. De ahí, Chivas tuvo que remar contracorriente.

Delantera de Chivas sin puntería

Generación de llegadas por parte de Sandoval y Álvarez hubo, remates de González se dieron por destajo, aunque ninguno de ellos tuvo dirección de gol. La ‘Hormiga’ no anduvo fino, erró dos opciones claras de gol, como si su olfato goleador se hubiera desgastado tanto en los partidos anteriores.

El goleador rojiblanco primero dejó escapar una oportunidad inmejorable frente al arco de Allison luego de una serie de rebotes y minutos más tarde se perfiló hacia la portería pero terminó por enviar su disparo a la grada.

Sandoval también tuvo la suya. El ‘Negrito’ fue víctima del mismo mal que su colega y no pudo empatar el marcador luego de recibir un centro preciso a su ubicación dentro del área chica.

Chivas insistió, con ese corazón que se le ha visto en jornadas recientes, pero esta vez no fue suficiente. Querétaro fue permisivo, se encerró en su mediocampo y cedió la iniciativa para buscar un contragolpe.

Desde el banquillo se enviaron cuatro modificaciones prácticamente continuas. Milito no se guardó nada: Alvarado, ‘Guti’, Camberos y Wilke, todos en búsqueda del gol. Uno de los sacrificados fue la ‘Hormiga’ que lamentó haber desperdiciado las chances que tuvo.

Una modificación extra fue necesaria por la lesión de Bryan González, que abandonó el terreno de juego con un rostro de dolor y frustración. Cowell entró al quite, pero no pudo aportar a la causa.

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El Rebaño buscó acercarse con los 10 hombres en terreno queretano, pero lo que encontraron fue un riesgo constante de ver duplicada su desventaja en el marcador. Un par de intervenciones de Rangel y una falla de Coronel salvaron a Chivas de una derrota más abultada. La racha de triunfos no trascendió más allá del número cuatro.