Este viernes el futbol mexicano se sacudió ante la confirmación de que Héctor Moreno se retirará formalmente del profesionalismo, dejando atrás 20 años de carrera. Moreno es de los casos cada vez más raros de futbolistas que decidieron no retirarse en el club de sus amores, el cual para él fue Pumas, de quienes vistió la camiseta únicamente un año.

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A sus 37 años, Moreno tiene en su única final con Universidad Nacional un recuerdo agridulce.

El paso de Héctor Moreno con Pumas

Es común que en la mayoría de los rubros se quiera salir de un lugar por la puerta grande y Héctor Moreno estuvo a punto de lograr ese cometido.

Como un auténtico joven maravilla, a su regreso del Mundial Sub 17 de Perú en donde formó parte de la generación campeona, Moreno comenzó a tener regularidad en el primer equipo de Universidad Nacional, al grado de ser tomado en cuenta para momentos importantes.

Con un año como titular, y ya consolidado como una promesa para ir a Europa y como una realidad en el futbol nacional, Moreno fue clave en el once titular de Ricardo Ferretti que llevó a Pumas a la final del Apertura 2007, pasando por encima de Toluca y Santos, todo para que en el momento importa se midiera ante la sorpresa del torneo, Atlante, que en su primer semestre en Cancún había conseguido lo impensado.

Previo a la final los rumores de la salida de Moreno inundaban los medios, quienes señalaban como un hecho que Héctor emigraría al futbol europeo para unirse al AZ Alkmaar al terminar la temporada.

Final vs Atlante, el último partido de Moreno con Pumas

Con esto en mente Moreno saltó a la cancha, buscando cerrar con un broche de oro un inicio de carrera espectacular que lo harían coronarse ya con su selección menor y su club a la corta edad de 19 años.

La final de ida desde el Estadio Olímpico Universitario culminó empatada a 0, en donde Moreno vio una amarilla, todo para que en la vuelta se decidiera el campeonato en el Andrés Quintana Roo.

Con un nuevo público en Cancún fascinado por la máxima fiesta del futbol en la primera categoría, el joven mexicano tenía la ilusión de ver allí una salida triunfal de la escuadra de sus amores.

Todo lo lejano a la que sería la realidad. Un partido complicado, trabado y con unos potros que se veían superiores. Con otra amarilla en su haber, Moreno no participó mucho y vio a lo lejos como eran los locales quienes se quedaban con el campeonato, nada de lo que esperaba antes del encuentro.

Tras este amargo episodio, Moreno vivió un momento cristalizado de felicidad, pues lo que se venía rumoreando se convirtió en todo un hecho, su llegada al AZ Alkmaar, equipo que le dio la bienvenida al futbol europeo y que lo hizo alejarse del club del cual surgió y en el que no pudo campeonar.

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