La Selección Mexicana se encuentra con Asia en su camino rumbo al Mundial 2026. El Tricolor, con Javier Aguirre al mando, pondrá a prueba su solidez frente a dos rivales de tradición creciente como Japón y Corea del Sur, en una jornada que podría servir para confirmar la superioridad histórica que México ha forjado en este tipo de duelos. De los 24 enfrentamientos previos ante escuadras orientales, suma 17 victorias, un empate y apenas seis derrotas, una cifra que traduce su dominio en un imponente 72% de efectividad.

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La historia arranca este 6 de septiembre en Oakland, California, cuando México mida fuerzas con Japón. Será la séptima vez que ambas naciones se crucen en una cancha, pero con un balance aplastante para los verdes con un total de cinco triunfos al hilo desde el año 2000. El único resbalón fue en 1996, en aquel debut en el historial, pero desde entonces el Tricolor no sólo ha sabido ganar, sino que lo ya hecho en escenarios de peso y jerarquía como la Copa Confederaciones (2005 y 2013).

La Selección Mexicana juega contra Japón el 6 de septiembre y contra Corea del Sur en 9 de septiembre

Tres días más tarde, el 9 de septiembre, la cita será en Nashville frente a Corea del Sur, el adversario asiático más recurrente en la historia del equipo de todos. Son 14 enfrentamientos, con un balance favorable de 8 triunfos, un empate y cinco derrotas. No se tratará de un rival sencillo debido a que los coreanos han sorprendido en Mundiales. En 1998 opusieron resistencia, pero un 1-3 fue benéfico para los nacionales, mientras que en Rusia 2018, Carlos Vela y Chicharito pusieron el 2-1. También han sufrido la contundencia mexicana, como en el 4-0 de 2014 con goles de Oribe Peralta y Alan Pulido(3).

Mientras que el recuerdo más reciente es alentador con victoria 2-3 en noviembre de 2020, con anotaciones de Raúl Jiménez, Uriel Antuna y Carlos Salcedo.

México domina al resto de Selecciones Asiáticas

El panorama se completa con rivales que México ha enfrentado en menor medida, pero con resultados más que favorables. Ante China, la balanza es perfecta con tres triunfos en tres partidos (1987, 1993 y 2008), con actuaciones sólidas. Y contra Corea del Norte, sólo hay un antecedente en 2010, un amistoso previo al Mundial celebrado en Torreón que terminó 2-1 a favor de los mexicanos con goles de Chicharito Hernández y Cuauhtémoc Blanco.

Es por eso que el balance no deja ninguna dudas. México se ha hecho fuerte frente a Asia y estos partidos llegan en el momento justo para medir la evolución del proceso del técnico Javier Aguirre. La exigencia será consolidar un estilo de juego competitivo, probar variantes y fortalecer la confianza de cara a una Copa del Mundo en casa. La estadística avala al Tricolor en este tipo de cotejos, ahora le tocará confirmarlo sobre el césped de Oakland y Nashville.

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