Durante más de dos décadas, Eduardo Nájera y Horacio Llamas se han convertido en la inspiración de millones de pequeños que buscan seguir sus pasos en la NBA. Los dos primeros mexicanos que probaron suerte en la mejor liga de baloncesto en el mundo abrieron una puerta que parecía imposible para los talentos del país, pero que ahora, en plena globalización, cada vez es más grande.

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Lalo Nájera y el ‘Becerro’ Llamas encabezaron la Clínica de Basquetbol IMSS 2025, misma que reunió a 500 niños, niñas y jóvenes talentos de entre 6 y 18 años que durante poco más de una hora fueron activados por referentes del ‘deporte ráfaga’ en la duela de la Unidad Deportiva Cuauhtémoc.

“Fue el comienzo de algo especial. Me voy a comprometer en regresar y hacer una clínica mil veces mejor, donde pueda participar con los niños y poder motivarlos. Creo que esa es la mayor motivación, que vean lo que se siente estar con un ex jugador de la NBA. Para que vean la velocidad, la fortaleza, la inteligencia y la técnica. Que las niñas y los niños están compitiendo, es algo muy importante”, comentó el ex jugador de los Dallas Mavericks.

“Es un trabajo colectivo. No solamente los jugadores, también de la organización del IMSS, la logística. Todos los que hacen esto posible espero que sigan con estos esfuerzos. Este es el comienzo de varias clínicas de basquetbol”, añadió en plática con ESTO.

Además de Nájera y Llamas, también participaron el evento el actual coach de la selección mexicana, Omar Quintero, además del ex seleccionado Pery Meza. De igual forma estuvo representado el baloncesto femenil con la actual seleccionada Mariana Valenzuela, quien viene de ser la figura en el torneo COCABA conquistado por México.

“Tenemos que dar mensajes sanos. Todo el mundo se queja, pero no hace nada al respecto. Además del basquetbol, me gustaría hablar de la alimentación que es muy importante. Eso también deben aprender las nuevas generaciones y los padres de familia”, explicó el chihuahuense que pasó 12 años en la NBA.

Por su parte, Héctor García Antonio, Coordinador Técnico de Cultura Física y Deporte del IMSS, destacó la importancia de que las figuras del deporte mexicano puedan causar un efecto positivo en las nuevas generaciones.

“Cada canasta encestada en esta jornada fue un símbolo de esfuerzo, disciplina y voluntad. Estas acciones no solo enseñaron a jugar, sino a vivir con valores. El IMSS transforma canchas en semillero de líderes, porque creemos que el deporte es motor de salud, carácter y superación”, indicó el directivo.

Eduardo Nájera pide pide mejores oportunidades para que los basquetbolistas mexicanos lleguen a NBA

Sabedor de que en México no existe un programa que le permita a los grandes talentos desarrollarse de la mejor forma, Eduardo Nájera alzó la voz con la intención de que la iniciativa privada enfoque sus esfuerzos para tener a más jugadores en la élite.

“El sistema está fragmentado, no solamente en México. En Estados Unidos ayuda mucho la iniciativa privada. En mi opinión, aquí la iniciativa privada busca todo para ellos. Esa debería ser la plataforma para el basquetbol, pero es un trabajo colectivo. También es un deber, el cuidar la salud mental y física. Es algo que no se ha hecho en México y espero que eventualmente se haga”, explicó Lalo Nájera.

“De los 15 a los 20 años, hay un hueco donde no tenemos competencia. No hay basquetbol en esa etapa. El basquetbol no es un deporte elitista, es un deporte de la raza. Yo salí de un rancho (risas), necesitamos entenderlo para que los niños que están desarrollándose más atención tenemos que darles, para que se vuelvan profesionales, obtengan una beca o estén fuera de peligro en un ambiente muy sano”, finalizó.

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