Randal Willars tiene claro que México se ha ganado el respeto de la comunidad de clavados, incluso, de los representantes chinos que, por muchos años, dominaron la disciplina “hoy nos ven como una amenaza”, dijo el doble medallista en el Campeonato Mundial de Deportes Acuáticos que recientemente se realizó en Singapur.

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El tijuanense reconoció que a los clavadistas del gigante asiático los ha visto preocupados por el nivel mostrado por los mexicanos ya que, aseguró, saben que no será sencillo vencer a los representantes tricolores.

“Cada vez les metemos más presión, nos acercamos y ellos también lo están sintiendo, sienten nervios a la hora de competir, y es lo que uno tiene que hacer. Ponernos al mismo nivel y pelearles con todo en la competencia, y que al más mínimo descuido, al más mínimo error les podamos arrebatar el resultado”.

“Los competidores de China ya no están tan cómodos como a veces solían estarlo, antes solo la pelea era entre ellos; hoy se preocupan por nosotros, se sienten amenazados, sienten que se tienen que esforzarse más y no dudo que lo harán, tampoco se van a dejar simplemente vencer, así que uno tiene que trabajar más duro para seguir teniendo la posibilidad de arrebatarles todas las medallas”.

Randal Willars se colgó dos preseas en el Campeonato Mundial

Randal obtuvo una presea de plata en el Campeonato Mundial en la modalidad de equipo mixto, además de un bronce en plataforma individual varonil “pero no me conformo, quiero que ese bronce se convierta en oro”.

Para alcazar ese objetivo, sabe que aún tiene cosas por mejorar “mantenerme será lo más difícil, tratar de siempre estar en el podio y en lo más alto. Es un trabajo de todos los días, es un trabajo de mucha dedicación, pero que lo disfruto muchísimo y estoy muy comprometido”.

“Todavía hay muchos detalles que puedo pulir, que puedo mejorar. Siempre el objetivo es el clavado perfecto, no es fácil porque el sistema de jueceo es cada vez más estricto, cada vez es más difícil sacar un diez o acercarte a los dieces, uno tiene que pulir hasta el más mínimo detalle para mejorar esas calificaciones”.

La experiencia que adquirió en los Juegos Olímpicos de París, donde se quedó cerca del podio pero se le escapó en el último clavado, le permite encarar el ciclo olímpico con mayor experiencia.

“Los Ángeles 2028 serían mis segundos Juegos Olímpicos, creo que la experiencia de de París me va a servir muchísimo, pero en 2026 hay otro mundial y desde ya me estoy empezando a preparar y de aprovechar al máximo cada cada competencia, cada experiencia que me lleven a ser un mejor clavadista, sueño en ese oro olímpico y es una meta que hará lo posible por alcanzarla”, finalizó.

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