Stephano Carrillo tiene claro lo que quiere: triunfar en Europa. El delantero mexicano, hoy en las filas del Feyenoord, forma parte del proceso Sub-20 de la Selección Mexicana que disputará el Torneo Maurice Revello, y lo hace con la mente firme en ganarse un lugar en Países Bajos y no regresar a México en un futuro cercano.

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“Yo creo que sí, el estar en Europa tiene más reflectores, pero igual si no trabajas bien, si no te esfuerzas, el siguiente año estás de regreso en México. Entonces para mí eso no es algo que está en mi mente, yo me quiero quedar allá y con mi trabajo van a llegar las cosas solas, no necesito pensar en que si van a ir al Mundial, que si esto o que el otro, yo estoy concentrado en lo mío, en lo que me toca y si llegan las cosas bien”, aseguró en zona mixta desde el CAR.

A sus 19 años, el joven dejó claro que no se trata de competir con sus compañeros por quién milita en el extranjero, sino de contribuir en conjunto. “Yo no me concentro tanto de que si algún jugador viene a Europa, que si yo vengo a Europa, yo creo que todos somos un equipo y todos estamos aquí para sumar y sumarle al otro jugador, todos somos un conjunto y lo que hagamos es para el bien del grupo”, dijo.

Stephano Carrillo sigue el ejemplo de Santiago Giménez en el Feyenoord

Aunque todavía no ha podido hablar directamente con Santiago Giménez, mexicano que brilló en el club de Rotterdam, Stephano Carrillo lo tiene como una referencia inmediata. “No, con Santi no he tenido la oportunida de hablar cara a cara ni por mensaje se puede decir pero sí yo creo que es algo que tengo en mente que me puede ayudar bastante y tal vez próximamente hable con él. Claro, si él lo hizo, ¿por qué yo no?”, aseveró.
Desde su llegada a Europa, Carrillo ha tenido el respaldo de la directiva del Feyenoord. En especial de Dennis te Kloese, director deportivo del club. “Sí, cuando recién llegué obviamente hablé con él, es una persona que siempre está en comunicación conmigo y él me dice que no tengo presión de nada, que nada más demuestre el por qué ellos me vieron, de por qué ellos me venían siguiendo y que lo demuestre, que no tengo ninguna presión pero que él sabe el jugador que soy y que solo demuestre y el trabajo es mío”.

Más allá de sus pocos minutos con el equipo, el aprendizaje en Feyenoord ha sido profundo. Bajo la guía de Robin van Persie como su técnico, uno de los delanteros más letales en la historia del futbol neerlandés, Carrillo ha ganado madurez dentro y fuera del campo.
“Obviamente él fue un 9 muy bueno, yo creo que top en Holanda entonces pues me ha dado consejos, movimientos pues también yo creo que esa madurez desde delantero de no siempre estar como alterado sino saber en qué momento hacer lo que te toca y aparecer en el momento que estás”, finalizó.

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