El equipo de Toros Neza se hizo inolvidable sí por lo que hizo en la cancha, pero sobre todo por lo que hacían fuera de ella, y que gran parte de la culpa fue de Antonio Mohamed (que estuvo de 1993 a 1998), ya que era quien inventaba y organizaba que los jugadores se pintaran el cabello, usarán máscaras, etc.

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Y aunque hicieron muchas cosas, consideradas ‘locuras’, pero se quedó una pendiente y que años después, el ‘Turco’ reveló y lamentó no poder haberlo hecho, pues hasta la fecha está seguro que hubiera causado revuelo en el futbol internacional.

“Usamos máscaras, fuimos los primeros. Después teníamos otra a la que no llegamos porque el equipo se desinfló, pasamos al Repechaje y quedamos afuera para entrar a la Liguilla, pero lo habíamos practicado, era espectacular porque era con todas las caras pintadas como en un cumpleaños, como si fuéramos mimos y como tigrito, gatito, como león, todos pintados, practicamos, era pintura indeleble y con la traspiración no se caía, lo que hubiera sido todos con las caras pintadas, pero quedamos fuera de la Liguilla”, dijo en entrevista para el periódico argentino a Olé en 2024, donde además recalcó que todo lo que hacía el Toro Neza estaba aprobado por la directiva que era la que terminaba pagando las multas.
“Era lo máximo, todos pintados de blanco. Se pagaba una multa y el dueño estaba dispuesto a pagarlo porque era marketing e iba a salir en todo el mundo, pero era de risa, no podíamos jugar por ver a algunos con bigotitos”.

Antonio Mohamed, de los primeros jugadores en la Liga MX en pintarse el cabello

Y dentro de lo que hizo inolvidable a los Toros Neza de Mohamed en la década de los 90. También fue la imagen con la que el ‘Turco’ jugaba, sobre todo por su cabello. Ya que pasó de cabello largo a raparse, y después pintárselo de colores. Pero reconoció que siempre estuvo consciente de que no podía bajar su nivel porque sería criticado.
“Había pelo de colores, se tiñó todo el equipo. Me rapé primero, después me lo dejé crecer y me lo pinté de colores; llegué con el pelo largo. Pero tenía de técnico al maestro Reinoso que me molestaba todos los días con que el pelo y pelo, y una vez estando de compras. Le dije a un compañero que iría al baño, me metí a una peluquería y les dije ‘rápame’ y la gente se rapó. Y apareció una bandera que decía ‘Todos somos Mohamed’, se raparon todos, luego se pintaban todos.

“Yo tenía el pelo pintado y habíamos hablado en un autobús y prometíamos algo. Le dije que si clasificábamos se pintaban todos el pelo, el día que pasamos a la Liguilla salimos todos así. Fue increíble y al otro torneo salimos con las máscaras. Era un poco de folclor pero que te daba responsabilidad al máximo porque si no te iban a decir que eras un payaso”, señaló.

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