El invicto llegó a su final en el momento más doloroso. Vicente Sánchez y Cruz Azul fueron eliminados de la Liguilla por su eterno verdugo americanista y se esfumó el sueño del doblete. La Máquina cayó en el partido de vuelta de semifinal (2-1) y puso fin a una histórica racha de 19 partidos sin derrota, justo cuando estaba a dos pasos del título y de romper su propia marca. Aun así, el técnico celeste no bajó la cabeza y ha apuntado directamente a la final de la Concacaf Champions Cup 2025.

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“Me voy dolido, triste. Siempre en todo momento desde que iniciamos íbamos por los dos torneos. Llegar a semifinales del torneo local y a la final de Concacaf era lo que queríamos, pero también llegar a la final de los dos torneos. Hay que pasar rápido la página, lo más pronto posible para preparar la final“, aseguró en conferencia de prensa.

El entrenador charrúa no culpó a nadie, mucho menos al portero Kevin Mier. Sánchez reconoció el esfuerzo colectivo y aceptó que la serie se definió por detalles, como suele ocurrir en instancias así.

“No hay errores, somos un equipo, cuando ganamos, ganamos todos y cuando perdemos también. Era el partido 20, perdimos el 20, teníamos 19 partidos sin perder, sabíamos que iba a ser un partido así de apretado e intenso. Encontramos el gol, nos meten gol, quisimos ir por otro y no se pudo“, aseveró.

Vicente Sánchez analizará la semifinal para corregir errores

La derrota como visitante dolió más por lo que estaba en juego, pero también por el desgaste de un semestre tan exigente. Fue por eso que le agradeció a sus pupilos por todo su esfuerzo en estos cuatro meses desde que tomó el timón cruzazulino.

“Analizaremos el juego, es muy rápido. Era una semifinal, se iba a definir por detalles. Es la Liguilla, hay que estar muy preparados, le tocó a ellos, servirá de experiencia. Agradecerle a los jugadores, jugamos cada tres días, agradecer a la afición que nos apoyó en el torneo y sin duda estarán en la final”, finalizó Vicente Sánchez.

Paulo Víctor celebra la victoria ante Cruz Azul

El pase a la final sacó el orgullo de Paulo Víctor Rodrigues. La mano derecha de André Jardine fue el que dio la cara tras la remontada americanista. Contento, el brasileño confirmó que ni en sus mejores sueños pensó un encuentro como el que se vivió en el estadio Ciudad de los Deportes.

Todavía con la euforia en su persona, el auxiliar agradeció a todos por el esfuerzo. “Es un orgullo tremendo ser parte de esta institución, este grupo de trabajo, en general de todo el staff del club que trabaja mucho, merece mucho. Ha sido un placer y nos sentimos bien estando aquí y nos sentimos orgullosos de este grupo de jugadores. Ni en nuestros mejores sueños saliendo de Brasil dos años atrás habría imaginado cuatro finales consecutivas. Hay que valorar el trabajo del club que nos extendió la mano de la mejor forma posible”.

Incluso, confirmó que en ningún momento las Águilas se sintieron fuera de la eliminatoria, sobre todo por las situaciones que vivieron como el regreso de jugadores o la euforia del estadio amarillo. “No concuerdo que América estuvo muerto, son planteamientos y tuvimos el regreso de Zendejas, pasa mucho por la idea, tenemos que jugar con el reglamento, se tiene que jugar con la cabeza, y así fue. Salió bien lo que fue planeado, salió como esperamos en defensa y ataque. Hay que valorar a los jugadores que hacen todo lo que fue pedido”.

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El agradecimiento no solamente fue para los protagonistas, Rodrigues Gomes se dijo orgulloso por la forma en la que los seguidores viven el americanismo en noches como la que se vivió el domingo. “A la afición le agradezco mucho, fue una de las fiestas más lindas que he vivido en un estadio. Pedir para que estén el jueves con nosotros, que hagan otra fiesta maravillosa para tener un primer partido de final muy bueno para cumplir con el objetivo”. / Con información de Miguel Ángel Mújica