El argentino Hugo Gatti fue considerado, en su momento, como uno de los mejores porteros del planeta, sobretodo durante su exitosa época con Boca Juniors. Sin embargo, ni ese estatus lo salvó de ser víctima del Club América y, en específico, de Carlos Reinoso, quien le marcó un gol que hasta la fecha es recordado como uno de los más importantes en la historia de la institución.

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Fue en 1978 que el América y Boca Juniors se encontraron en el duelo por la extinta Copa Interamericana, el duelo que desde 1969 y hasta 19998 enfrentó a los monarcas de la Copa de Campeones de la Concacaf y de la Copa Libertadores.

El juego de ida fue el 28 de marzo en Buenos Aires, y ahí los Xeneizes aplastaron por 3-0 a las Águilas con doblete de Carlos Salinas y uno más de Ernesto Mastrángelo. La vuelta se celebró el 12 de abril Estadio Azteca y los azulcremas fueron capaces de sacar la victoria con un solitario tanto del paraguayo Hugo Kiese.

Al repartirse triunfos, se acordó un duelo de desempate dos días después en el mismo “Coloso de Santa Úrsula”, y previo a ese partido que Carlos Reinoso recibió una motivante propuesta.

Reinoso recuerda cómo lo motivó Guillermo Cañedo para hacer gol en la Copa Interamericana

El chileno recordó en 2024 para el podcast “El Re-Portero”, conducido por Yosgart Gutiérrez, ex guardameta de Cruz Azul, Pumas, entre otros, que antes del duelo decisivo tuvo una interesante plática con Guillermo Cañedo de la Bárcena, entonces presidente del América.

“Llegó con Don Guillermo Cañedo al entrenamiento después del primer partido que ganamos y llegó en un automóvil LeBaron y lo veo le digo ‘huy, cuando sea grande voy a tener uno de esos’. Él me contestó: ‘si en el partido contra Boca metes un gol, te lo regalo”, rememoró.

En el partido, Boca Juniors se adelantó con tanto de Severiano Pavón a los cinco minutos, mientras que José de Jesús Aceves empató a los 33′ y así culminó el tiempo regular. El juego trabado y sin oportunidades claras se alargó hasta la recta final de la prórroga, cuando se marcó tiro libre para el América en los linderos del área.

El portero Hugo Gatti acomodó hasta siete de sus compañeros en la barrera para evitar el gol, pero una vez que Reinoso colocó el derechazo pegado al poste, el argentino no pudo hacer más que observar la caída de su meta.

Carlos Reinoso celebró el gol y la obtención de un lujoso LeBaron

Reinoso, eufórico como todo el público y en el Azteca, corrió hasta el palco de las autoridades del América para celebrar la obtención del título y también su nuevo automóvil.

Posteriormente, recibió una llamada en el vestidor donde se le solicitaba su presencia en el palco de Cañedo y también de Emilio Azcárraga Milmo. Las sorpresas aumentaron.

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“Don Emilio le preguntó a Cañedo sobre el regalo y le explicó que si yo metía el gol me iba a regalar un carro LeBaron. A lo que el dueño del América me dio otras llaves de un coche también“, recordó entre risas.