A pesar de la diferencia generacional, Max Verstappen y Michael Schumacher tuvieron una especial coincidencia en la F1 gracias al padre del neerlandés, quien fue coequipero del teutón durante 1994, cuando ambos corrían juntos en Benetton.

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31 años después, Mad Max es un campeón hecho y derecho de la Fórmula 1, de la que es el mayor rostro en este momento tras heredar la corona que en algún momento ostentó el alemán, quien desde hace varios años pelea dramáticamente por su vida tras un accidente mientras esquiaba.

Es por eso que Verstappen recordó cariñosamente a quien él llama su tío.

“Era muy amable, un hombre de familia extremadamente grande, pero nunca lo vi como un campeón mundial de récord, no estaba al tanto de eso, para mi sólo era el tío Michael. Lo puedes ver en las fotos y videos antiguos que tenemos en casa. Mick y Gina, sus hijos, siempre estuvieron ahí. Fue grandioso, todavía hoy tengo grandes recuerdos positivos de esos fines de semana”.

Michael Schumacher tuvo una estrecha relación con la familia Verstappen

Debido a la cercanía de sus padres, Max Verstappen pasaba mucho tiempo en casa de los Schumacher, donde corrían en los go karts y hasta se comunicaba en alemán.

“Siempre íbamos a los karts en biplazas. Michael iba con Mick o Gina, y mi padre conmigo, pero cuando se volvía demasiado peligroso ellos se hacían cargo del volante. Mi padre comenzó a hablar alemán conmigo a una edad muy temprana, principalmente en las pistas de karts. Él lo quería así, para tener un equilibrio en las conversaciones en casa”.

Verstappen padre y Michael Schumacher sólo coincidieron durante un año, en el que Michael se consagró campeón mundial, mientras que su compañero abandonó la escudería al año siguiente para integrarse a Simtek.

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