Su voz se entrecorta cada que recuerda el 16 de diciembre del 2000. Aquella ocasión, el mundo de la lucha libre perdió a una de sus más grandes leyendas, Blue Demon, sin embargo, el Jr perdió más que un ídolo, se fue su padre, su socio y su mejor amigo.

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Blue Demon Jr relató en una entrevista con Latin Lover que su padre murió en sus brazos y cómo tuvo que pelearse con unos policías para que lo dejaran llevarse el cuerpo inerte de la leyenda.

“Él fallece en mis brazos, en las afueras del metro Potrero. Había estado ahí como a las ocho de la mañana, porque me iban a entregar unos equipos. Era un secreto a voces que la gente quería a mi papá, lo veían sin máscara y sabían que pasaba Blue Demon”, compartió el gladiador.

El heredero del ‘Manotas’ compartió que fueron a tocarle hasta su casa que estaba ubicada en la Calle Necaxa de la Colonia Industrial. Demon Jr corrió hasta la estación del metro y ahí hizo lo imposible por mantenerlo con vida.

“Ese día temprano estuve con el que me entregó los equipos y me regresé. Hasta que me van a tocar a la casa: ‘oye, tu papá se acaba de desmayar en el metro’. Agarré mis botas, me fui en sentido contrario… le di RCP y cuando vi que ya era imposible de lograrlo, lo abrazo y nada más sentí cuando exhaló”, dijo.

Blue Demon Jr se peleó con los policías para que lo dejaran llevarse a su padre

El luchador compartió que discutió con los policías para que permitieran que se llevara el cuerpo de su padre. Además, tuvo que buscar un médico para que les dieran un acta de defunción. Después de eso, comenzó a llegar su familia a casa.

“La primera en llegar fue mi mamá, desecha. Una hora después llegó mi hermana y así nos fuimos haciendo hasta que la familia llegó. El día que enterré a mi papá me fui a trabajar“, explicó para dejar claro que fue uno de los momentos más complicados de su vida.

Cuestionado sobre si aún le falta su padre para darle algún consejo, Demon Jr aseguró que siempre, pues él era mucho más que solo su papá.

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“Él era mi maestro, compañero, confidente, era todo. Cuando él se va dije ‘ahora qué voy a hacer’, todo el mundo me puso enfrente de la casa. Es difícil porque el día de hoy siempre he necesitado el consejo, y me pongo a platicar con él en una foto, y le digo ‘ya entendí por qué me preparaste así’, es difícil tomar esa responsabilidad”, cerró.