Guadalajara.- La presión sigue en aumento para Rodrigo Pacheco Méndez. El todavía joven tenista mexicano se ha quedado relegado con jugadores de su generación, a los cuales vio a la cara en su etapa como junior, pero que el salto al profesionalismo los ha separado.

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En la actualidad, Rodri está al menos dos escalones por debajo de otros talentos menores de 20 años de edad, pero que se han asentado en el top-100 de la ATP como el brasileño Joao Fonseca, el francés Arthur Fils o el estadounidense Learner Tien.

Pese a los más de 200 puestos de diferencia que existen en la clasificación varonil, el yucateco considera que es cuestión de tiempo para que pueda lograrlo. “Compartí mucho (tiempo) en junior con Fonseca y Learner, teníamos un nivel muy parejo. Ahora que veo lo que han logrado, sé que también puedo hacerlo. Tengo que empezar a tener más protagonismo. Lo veo como una motivación para poder seguir su camino”, comentó Pacheco Méndez en medio del UTS de Guadalajara.

“A ellos les gané y me ganaron. Cada quien tiene su tiempo en llegar, lo importante es hacerlo. Ellos hicieron mejor las cosas, pero yo tendré mis oportunidades y espero poder tomarlas. Tengo el tenis y la materia. Ellos maduraron antes que yo”, agregó.

El ranking habla por sí sólo. Rodrigo Pacheco, la principal carta del tenis mexicano en la modalidad de singles, ocupa el casillero número 369, posición que espera mejorar a lo largo del año para llegar a 2026 dentro de los primeros 200: “sería una muy buena meta. Día con día lucho para poder alcanzarla. Con ayuda de todos los mexicanos, sé que lo podremos lograr”.

¿Qué le falta a Rodrigo Pacheco para que logre consolidarse en el tenis?

La juventud también le ha pasado factura al yucateco, que como casi todos los deportistas del país les cuesta subir su nivel en los momentos de mayor presión. Esa falta de madurez le ha impedido sacar su mejor versión, situación que espera revertir en esta gira de torneos por el país que incluye el Abierto de Acapulco. Trabajar el aspecto mental sigue siendo una prioridad.

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“Me ha costado trabajo. Me dolía cada derrota. Me autocriticaba mucho y me hacía mucho de menos, eso me impedía cambiar las cosas. Hoy en día sé que voy a perder muchas veces. Sólo gana uno de los mejores 100 del mundo. Tengo que aprender para que cada derrota me haga más fuerte. Debo ir con el 100% de la confianza. A la larga, eso me hará ganar más partidos. En estos momentos me siento más preparado que nunca. Ya tengo un mejor ranking para el nivel Challenger. Tengo grandes expectativas para ir subiendo en el ranking”, culminó el tenista de 19 años.