La ofensiva de México falló en el momento que más se le requería y con apenas un hit conectado era imposible coronarse. Los Charros de Jalisco perdieron 1-0 contra Leones del Escogido, de República Dominicana, que se coronaron por quinta ocasión en una Serie del Caribe.

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Sí hubo quinta mala para el mánager Benjamín Gil, quien buscaba su primer título en este certamen, pero de nuevo se le escapó tal y como sucedió en sus cuatro aventuras anteriores. Esta edición 67 de la Serie del Caribe de nuevo quedó en manos de una escuadra dominicana que se reafirmó como la nación más triunfadora de este evento con 23 títulos, mientras que la décima corona no llegó para México, que desde el 2016 no ve a una novena campeona cuando lo hizo Venados de Mazatlán.

México y República Dominicana tuvieron una fuerte pelea

Las dos novenas mostraron poderío en el primer inning a lo largo del certamen, por lo que era importante para ambos equipos sostener la argolla en el amanecer del juego. Incluso, el abridor de Charros, Manny Bañuelos, pasó apuros, pero su defensiva lo respaldó con notables jugadas de Alfredo Hurtado y Jack Mayfield para el segundo y tercer out, de forma respectiva. En tanto Esmil Rogers retiró a sus enemigos en orden. Un inicio titubeante de un lado y firme en el otro.

Bañuelos solventó el segundo episodio en el que le volvieron a encontrar la bola, aunque sin hacerle daño, mientras que Rogers comenzó a sufrir con turnos largos, tanto que se le llenaron las bases, no obstante, Hurtado, no pudo conectar el hit anhelado y el pitcher visitante salió airoso. Cabe recordar que Rogers comenzó el duelo en lugar de Johnny Cueto, quien presentó gripe.

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México no logró pelear ante los dominicanos

De igual manera los dos equipos comandaban el departamento de robos en el torneo, por lo que había otra preocupación para las defensivas. En el tercer episodio, se le llenaron las casetas a Bañuelos con Sócrates Brito como ladrón protagonista. Robinson Canó se paró en la caja de bateo y pegó sencillo que terminó en doble play, pero suficiente para que Junior Lake pisara el plato. Por primera vez en esta Serie del Caribe, México se vio abajo en la pizarra y la tercera fue la vencida para los dominicanos que en los dos capítulos previos dejaron a un elemento en la antesala.

Bañuelos dejó el diamante después de cuatro completas para el ingreso de David Gutiérrez, quien casi ve a doña blanca del otro lado con batazo de Brito, pero Casey la alcanzó por la pradera derecha. Del otro lado, Rogers siguió en el lado de los felinos cada vez más afianzado con apenas un hit aceptado.

En la fatídica, Jesús Cruz subió a la lomita del lado mexicano en busca de evitar más ventaja de los dominicanos y con la esperanza de que la ofensiva tricolor despertara, pero ni el pinch-hitter Japhet Amador fue factor. En Leones del Escogido, Joe Corbett reemplazó a Rogers, quien lanzó 101 serpentinas, 56 por la zona de strike, apenas toleró un imparable, obsequió cinco pasaportes y ponchó a cuatro enemigos. Se llevó el triunfo.

La afición de Mexicali no decepcionó

El tiempo se le estaba terminando a los de Benjamín Gil y en la octava comenzó a escucharse el “sí, se puede, sí, se puede” en el pletórico Nido de los Águilas para despabilar a los maderos tricolores frente a la bola de Ulises Joaquín.

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En la novena entrada, Stephen Nogosek mantuvo con vida a México, pero sin la ofensiva no hubo milagro, aunque la esperanza siempre estuvo. Charros perdió el invicto en el momento menos oportuno. Jimmy Cordero ponchó a Reynaldo Rodríguez para el out 27 y se adjudicó el salvamento.