Veljko Paunovic salió a la cancha del estadio Independencia de Nicaragua con un once alternativo y no solo no pudo sacar ventaja en el primer capítulo de la serie ante el Real Estelí, perdió el partido con un gol en los minutos finales. Ahora, en suelo regiomontano, los Tigres deberán de remar contra corriente para remontar el 1-0 con el que salieron de su debut en la Concachampions.

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El estratega serbio minimizó de más al equipo centroamericano y envió siete cambios con respecto a su alineación titular, decisión que le salió muy cara. La línea defensiva sufrió dos modificaciones, una de ellas en la central. Joaquim, zaguero que regularmente hace dupla con Jesús Angulo en el campeonato local ni siquiera hizo el viaje, por lo que José Purata tomó su lugar.

En juvenil Fernando Ordóñez también arrancó por la banda izquierda donde habitualmente lo hace Jesús Garza, quien fue cambiado al sector derecho. Un experimento fue lo que hizo el técnico universitario, uno que le terminó por explotar en el rostro.

¿Cómo fue el Real Estelí vs Tigres?

El partido fue confuso en todo momento para el cuadro regiomontano. El 4-4-2 que tiene a Tigres en el top3 del Clausura 2025 quedó en el olvido y apareció un extraño 4-2-3-1 que tuvo a Ozziel Herrera como eje de ataque en solitario. Vigon como creador de fútbol, detrás del nueve, nunca encontró espacio para cumplir su función. Por las bandas ni Córdova, y mucho menos Antuna brillaron, por el contrario, se notó un rostro de desacierto durante toda la noche.

Los nicaragüenses fueron cautelosos. Ante la falta de conexión de los felinos, fueron leyendo el encuentro de forma paciente hasta que encontraron la fórmula perfecta para sacar un resultado a su favor, el cual les permitirá viajar al Volcán con cierto grado de tranquilidad.

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Ya cerca del final, en el 83, el argentino Fernando Grahl puso el único gol de la noche en una jugada que todos los universitarios lamentaron. Aquella serie que parecía abierta, para resolverse en casa, se tornó una pesadilla que ahora deberán de ganar sí o sí con un ventaja de dos goles. Aunque la misión no es imposible, sí será compleja si Paunovic decide volver a subestimar a un Real Estelí que le plantó cara sin miedo a perder.