Para Cruz azul no es suficiente sufrir por toda la novela extra cancha de Martín Anselmi, trasladaron su agonía a la cancha del estadio Caliente. Ganar sin sufrir había sido de ser una constante en los últimos dos torneos para La Máquina, pero ante Tijuana desaprovecharon una noche cómoda y terminaron pidiendo la hora para sacar un milagroso 2-3 a su favor.

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La Máquina sigue sin poder encontrar su mejor versión, aquella que los llevó a dominar la Liga MX durante el 2024. Parece ser que Anselmi se fue y se llevó con él la valentía de este equipo. En la frontera, los celestes solo fueron capaces de mantener la concentración durante 45 minutos.

Vicente Sánchez envió una sorpresiva línea de cinco y un poderoso tridente al ataque. La conexión entre Romero y Giakoumakis rindió frutos muy temprano. Una jugada de fantasía, de esas que parecen sacadas de un videojuego terminó por servir a Luka Romero, quien se estrenó como goleador cementero en su tercera presentación.

El griego estuvo muy participativo, tanto así que duplicó la ventaja con un remate de cabeza, un tanto fortuito, pero al final gol. Cruz Azul lo intentó en repetidas ocasiones, un poste le negó su gol a Rotondi, pero tuvo su revancha unos minutos después desde los once pasos. El argentino no erró ante Corona y envió a su equipo al descanso con un sublime 0-3.

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Cruz Azul casi pierde una ventaja de 3-0

La segunda mitad fue una pesadilla para La Máquina. Juan Carlos Osorio envió cuatro cambios de golpe, algo que podría ser descrito como una locura, pero ese disparate fue el mejor acierto del colombiano. Tijuana emparejó en primera instancia la posesión del balón, posteriormente se apoderó del dominio del juego y por ende las ocasiones en el área de Kevin Mier fueron cayendo.

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Primer fue Iván Tona el que revivió a un inmueble que estaba inmutado por el marcador en contra. Un servicio que sorprendió a la zaga terminó por desatar la furia de Mier ante sus defensas. Cinco minutos más tarde Ditta regaló a Zúñiga el segundo del partido. El mismo ‘Pantera’ empató el marcador, pero Cruz Azul fue salvado por el arbitraje que invalidó el tanto de la igualada, 2-3 final.