A tan solo cuatro meses de debutar como boxeador profesional, Marco Verde toma con calma su transición. La medalla de plata que ganó en París 2024 elevó las expectativas y es consciente de que ya es considerado como uno de los mejores prospectos para buscar un campeonato mundial. El mazatleco, sin embargo, asegura que irá paso a paso en busca de la consolidación.

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“Como siempre lo he dicho, iré paso a paso, debutar y poco a poco ir peleando, ver el primer año y conforme vayan pasando las peleas. Al sentirme cómodo ya hablarlo con mi entrenador, con Eddy para enfrentar un título mundial”, dijo el mexicano, en conferencia de prensa.

El hecho de haber elegido a Eddy Reynoso como manager de inmediato dio paso a las comparaciones con el Canelo Álvarez. El “Green”, como se le conoce, tiene claro que quiere escribir su propia historia.

“La verdad yo solo quiero hacer mi trabajo, disfrutar, al final disfrutar el boxeo es algo que hago, subirme al ring, entrenar, es algo que me apasiona hacer. Al final si viene el ser un idolo y todo lo demás qué bueno, pero yo solo quiero pelear y disfrutar mucho de cada pelea”, dijo.

De la mano de su entrenador Radamés Hernández y con la guía de Eddy. El peleador de 22 años ya comenzó a definir la estrategia para su debut. El primer paso fue elegir el peso medio como su categoría y posteriormente acostumbrarse a las exigencias de peleas mucho más largas.

“Al final en el amateur solamente son tres rounds, es una pelea muy rápida, si pierdes el primer round ya casi estás perdiendo la pelea, así que ese va a ser el cambio. Calmarme un poco porque al final estoy acostumbrado a pelear tres rounds y la pelea es muy intensa y en el profesional va a cambiar. Hay desde cuatro hasta 12 rounds, así que va a ser una pelea más tranquila, más inteligente, obviamente ganar round por round. También cambia la pegada, los guantes”, explicó.

De lo que Verde está seguro. Sin embargo, es que no cambiará el estilo que lo ha llevado a la gloria, ese de darlo todo arriba del ring.

“Mi entrenador siempre me ha dicho de moverme, que no me peguen tanto. Pero bueno, al final a veces las peleas se complican y a veces si tengo que morir en la raya, pues voy a morirme en la raya. Así que en el profesional va a ser igual. Al final es dar una buena pelea. Si me tengo que morir, me moriré en la raya. Si tengo que moverme, contragolpear como siempre lo he hecho, porque me gusta ser un boxeador contragolpeador”, cerró.

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